México.- Paulina Gómez Zenteno, de 33 años de edad, médica especialista en otorrinolaringología y cirujana de cabeza y cuello, fue hallada sin vida el 21 de diciembre de 2019 en la azotea de su departamento, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. A casi 10 meses, su madre exige que el caso sea investigado como feminicidio porque sostiene que su hija fue asesinada por Rafael, quien era pareja sentimental de la mujer y que hasta ahora, no ha sido investigado.
Margarita Zenteno, mamá de Paulina, relató que su hija comenzó a tener una relación sentimental con Rafael en diciembre del 2018 y, aunque ella no confió en el hombre, respetó la decisión de la médico. Sin embargo, en julio de 2019, la madre fue testigo de una agresión contra de su hija.
Ese día, llegó a visitar a Paulina a su departamento, entró y vio que su hija estaba amarrada; Rafael se negó a dejar de violentar a la joven, por lo que Margarita comenzó a grabar la agresión y como respuesta, obtuvo una amenaza de muerte. Desde ese momento, la mamá le pidió a su hija finalizar con esa relación pero Paulina se negó y al poco tiempo la pareja se comprometió.
El feminicidio de Paulina
El 20 de diciembre de 2019 por la noche, Margarita recibió una llamada de su cuñada, esposa de su hermano Enrique Zenteno, quien vivía en el mismo edificio de los departamentos donde rentaba su hija; la cuñada identificada como Alma, le dijo que Paulina y Rafael estaban discutiendo.
La madre intentó comunicarse con su hija pero no obtuvo respuesta; fue Rafael quien le marcó para decirle que era urgente que fuera al departamento porque algo le había pasado a Paulina, pero sin darle detalles. Margarita salió de su casa ya en la madrugada del 21 de diciembre con rumbo al domicilio de la médico.
“Cuando llegué, vi a Rafael con mi hermano y mi cuñada que me recibieron con actitud defensiva y me dijeron que Pao estaba en la azotea. Subí y la encontré ya en el suelo. Lo primero que pensé y le dije fue ‘no me hagas esto Paulina’”.
Margarita Zenteno
En un primer momento, Margarita pensó que su hija había muerto por causas naturales, sin embargo notó que alrededor de su cuello tenía un par de calcetines y una marca; y después Rafael le dijo que se había suicidado. Esta versión, hasta ahora, ha sido la principal para la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chiapas y negada por la familia, en particular por la mamá de la joven que repite que su pareja sentimental, Rafael, es responsable del feminicidio.
Irregularidades en la investigación por el feminicidio de Paulina
Cuando encontró a su hija sin vida, Margarita también se percató de las marcas que tenía en los brazos como de forcejeo y algunos rasguños. Ya en la Fiscalía, declaró todo sobre la violencia previa contra su hija y de la que fue testigo por parte de Rafael, pero al hombre no lo detuvieron y tampoco lo entrevistaron por lo ocurrido.
“Cuando yo la encontré le dije ‘Pao no me hagas esto’ y ella me contestó ‘yo no lo hice’, de verdad ella me confirmó que la mataron y en cuanto llegaron los policías, denuncié a esta persona para que la detuvieran e investigaran pero me tiraron de loca, no lo han hecho y por eso sigue libre”.
Margarita Zenteno
Por las irregularidades de la FGE, la familia presentó una queja ante la Comisión de Derechos Humanos de Chiapas y también porque la dependencia se niega a seguir los protocolos con perspectiva de género y de feminicidio. Margarita está segura de que su hija no se suicidó, pues además, la joven tenía planes personales y profesionales por cumplir.
Otra de las denuncias es que la Fiscalía tampoco ha investigado la relación de su hermano Enrique y su cuñada Alma con lo sucedido, pues considera que una línea para indagar sería por posible robo contra Paulina, ya que la joven poseía varias pertenencias de valor que desaparecieron del departamento donde se quedó a vivir Rafael.
Covid-19 paralizó respuestas a Margarita por feminicidio de su hija
A casi 10 meses, Margarita aseguró que no hay avances para que su hija tenga justicia y la FGE tampoco acepta investigar el caso con protocolo de feminicidio; además, con la pandemia de Covid-19, refiere que todo se paralizó y las autoridades atrasan la atención debido a las medidas sanitarias y a pesar de que se declaró como actividad esencial, los servicios para atender la violencia contra las mujeres.
La principal exigencia de la familia es que se investigue el caso como feminicidio y en particular, la posible responsabilidad de Rafael y el encubrimiento de su hermano Enrique y su cuñada Alma en lo ocurrido; “la fiscalía de Chiapas no hace nada, lo último que hice fue ir junto a una feminista, a hablar con una fiscal que me dijo que el caso estaba abierto pero nunca han citado a Rafael ni lo han investigado”.
Por parte de las autoridades, Margarita también fue revictimizada pues la culparon del negado suicidio diciendo que ella golpeaba a su hija por los dichos de Rafael, quien también dijo cosas falsas de su pareja para responsabilizarla de su propia muerte. La madre de la especialista, por su parte, ha invertido en estudios privados de criminalística para sustentar su exigencia de investigar un feminicidio.
Paulina quería seguir trabajando y formar una familia
Un día antes de lo ocurrido, con entusiasmo, Paulina Gómez Zenteno le contó a una de sus compañeras en el consultorio donde laboraba, que al día siguiente tendría su prueba de vestido de boda y su mamá sabía que la joven estaba entusiasmada por construir una familia.
Además, hace apenas pocas semanas, Margarita supo por parte del Hospital General de la Ciudad de México, que por la especialidad de Paulina en cuello y cabeza, había conseguido una plaza en dicho hospital. Todos estos planes sustentan la exigencia de la familia para que el caso sea investigado como feminicidio pues consideran que la médico tenía un futuro por delante.
“Paulina quería casarse, seguir trabajando y tener un hogar. En estos meses de lucha, he notado que las autoridades lo que quieren es culpar a las mismas familias para que no levanten la voz ni exigan justicia, pero en mi caso, yo voy a luchar para que no sufran más madres e hijas lo que nosotras vivimos”.
Margarita Zenteno
Paulina es egresada de la UNAM; su madre Margarita la describe como una mujer genio que también hablaba inglés y francés, pintaba en óleo, era especialista y tenía cursos en cirugía estética.
{username} (@jfmoises) December 22, 2019
Feminicidios en Chiapas
Sobre el contexto de violencia en esta entidad, el Observatorio Feminista contra la Violencia a las Mujeres de Chiapas contabiliza de enero a los primeros días de octubre, 147 muertes violentas de mujeres; y donde han registrado un aumento gradual es en la incidencia de feminicidio en grado de tentativa pues en el mismo periodo suman ya 71 casos comparados con los 74 en todo 2019.
En entrevista con SDPnoticias, la directora del Observatorio, Karla Somosa, explicó que en el caso de Chiapas sigue pendiente que las investigaciones se sigan con perspectiva de género, pues a pesar de que en un inicio la Fiscalía dice que indaga los casos como feminicidio, con el avance de las carpetas, cambian el delito por homicidio o suicidio.
“En 2019 se veía que el caso de los feminicidios estaba recibiendo más atención pero recientemente se están desviando los casos para no aumentar los índices de violencia [...] las instituciones actúan con dinámicas patriarcales sin generar acciones y protocolos para atender la violencia contra las mujeres”.
Margarita Zenteno
Somosa señaló que las irregularidades en las investigaciones, como en el caso de Paulina Gómez Zenteno, comienza desde que los Ministerios Públicos integran de manera errónea las carpetas y las denuncias de familias que exigen investigar un feminicidio en lugar de suicidio, tienen en común la negligencia de las autoridades y que sólo avanzan por presión mediática.