Existe una gran polémica sobre la circuncisión debido a factores de cultura, religión y sobre todo médicas, sin embargo, se recomienda realizarse sólo bajo prescripción médica.

La circuncisión es una cirugía que se emplea para extirpar el prepucio del pene, con la finalidad de dejarlo permanentemente  descubierto, así lo expuso Jonathan Saucedo Bravo, urólogo del Hospital General Regional No. 36 “San Alejandro”, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Puebla.

Recomiendó que la madre del recién nacido realice ejercicios prepuciales, que consta en retraer el prepucio hasta que permita visualizar completamente el glande y a la gente adulta que no tiene esta cirugía mantener una higiene apropiada.

Pese a que médicamente no es necesaria la circuncisión, explicó que los beneficios que se encuentran al realizar esta cirugía es reducir las  incidencias en: infecciones de vías urinarias, cáncer de pene, contagio del virus de papiloma humana, del mismo modo enfermedades de transmisión sexual, incluyendo el VIH SIDA.

Saucedo Bravo indicó que la cirugía se realiza de forma ambulatoria, se aplica anestesia local que puede durar de veinte minutos a una hora, consiste en atraer el prepucio desde la cabeza del pene sujetándolo con un anillo de metal cortando el prepucio, la herida suele durar de dos a tres semanas.

Los cuidados que debe tener el paciente constan de colocar compresas de  hielo dentro de las primeras veinticuatro horas posteriores a la cirugía para reducir el dolor y la hinchazón,  realizar un aseo correctamente, ducharse con jabón sin aroma, evitar presencias de erecciones y usar fármacos indicados por el médico.

Aclaró que si se presentan síntomas como el enrojecimiento e inflamación en el pene, sangrado, pus y el dolor permanece, acudir al doctor inmediatamente.