México.- Lucio Yáñez García es un adulto mayor que se encuentra en el penal de Chiconautla, Estado de México, tras defenderse de un ladrón; en el centro penitenciario lo conocen como el "preso del violín".

El 13 de febrero de 2019, se defendió de un hombre que intentó despojarlo de su violín, con el cual durante muchos años ha obtenido ingresos para comer.

Fue "una mala jugada del destino", expresa Lucio, de 74 años de edad, en un reportaje de Saúl Sánchez Lemus, para Noticieros Televisa.

Lucio Yáñez.

Tras recibir un cachazo, tomó el cuchillo de un puesto de tacos para defenderse

En una de las calles del municipio de Ecatepec, el adulto mayor fue interceptado por un sujeto que intentó quitarle su violín; armado con una pistola, propinó un cachazo a Lucio quien sufrió lesiones en un oido.

En su desesperación, el hombre de la tercera edad tomó un cuchillo de un puesto de tacos e hirió al sujeto que intentaba robarle el violín, que finalmente se llevó.

"Yo considero que me defendí... Se llevó mi violín"

Lucio Yáñez García

Por ese hecho, a Lucio fue sentenciado por el delito de lesiones y se le impuso una fianza que al no poderla pagar se encuentra preso en el penal de Chiconautla.

Lucio Yáñez

Vecinos lo conocen desde hace 15 años

Como una persona tranquila, que nunca tuvo problemas con nadie, es conocido Lucio Yáñez García en la colonia en la que vive, desde hace más de 15 años.

Consultados por Noticieros Televisa, sus vecinos  consideran que el adulto mayor actuó en legítima defensa, al impedir que le arrebataran su instrumento de trabajo.

Así también lo considera el abogado penalista Raúl Espinola, quien considera que se violaron los derechos humanos de Lucio, pues se trató de una persona de la tercera edad e indígena.

"La cárcel está llena de personas pobres porque son las que no se pueden defender" ante la falta de recursos, agrega el defensor.

Piden 45 mil pesos para poder sacar a Lucio

En entrevista con Saúl Sánchez Lemus, una de sus vecinas del adulto mayor  Adela Alvarado García, dijo que quiso sacarlo de la prisión, pero le piden 45 mil pesos por dejarlo libre, cantidad con la que no cuenta.

Lo que sí hizo fue comprarle un violín y mandárselo al penal "para que se ganara una moneda".

Lucio Yáñez García, quien expresa que ha sido difícil estar en el penal, es indígena otomí, de la huasteca hidalguense.

Llegó hace 22 años al Valle de México en busca de un empleo, pero al ser analfabeta solo pudo conseguir trabajo de ayudante de albañil.

Al acabársele las fuerzas, se compró un violín con el que se ayudaba de las propinas que le daban.

Recuerda que cuando lo detuvieron, le impusieron una pena de 2 años, pero tendría que pagar 4 mil 666 pesos... "pero como no tengo quien me apoye".