México.- “Me dicen que siga con mi vida pero cómo si el asesino de mi hija no tiene rostro”, se pregunta Karen Reyes, mamá de Renata Martinely Luna Reyes, de 13 años de edad y quien fue asesinada al interior de su casa el 29 de noviembre de 2020 en la colonia Chocolines, municipio de Ixtapaluca, Estado de México.

Ese domingo, Karen salió del domicilio cerca de las 8 de la mañana para ir a trabajar; dejó a su hija dormida en su cama y se dio cuenta que tardaría en despertar porque una noche antes, la adolescente estuvo despierta hasta tarde platicando con sus amigos. En el transcurso del día, Renata debía llegar a la casa de sus abuelos, a unas cuadras de su hogar, para esperar ahí a su mamá pero no llegó y cuando fueron a buscarla, nadie abrió la puerta.

“La vi dormida y no quise despertarla, Reni se quedó sola en la casa pero ya teníamos un ritmo de vida, cuando me iba a trabajar, ella se despertaba, se arreglaba y algunos días se iba con sus abuelos que viven a unas cuadras o se quedaba a hacer tarea. Más tarde, a las 7 de la noche se iba a sus clases de jazz porque le encantaba bailar”.

Karen Reyes
Renata

Cuando Karen regresó de trabajar llegó a la casa de sus padres porque pensó que ahí estaría su hija pero le avisaron que no había ido en todo el día; acompañada de los abuelos y un sobrino, la mamá de Renata forzó la entrada del domicilio porque no tenía llaves y cuando entraron todas las luces estaban apagadas. Primero pensaron que la habían secuestrado pero al llegar a la habitación, encontraron a la adolescente asesinada, con signos de violencia en manos y cuello, y aún en pijama.

“Dicen que están trabajando” en resolver feminicidio de Renata

Karen aún no tiene la hora de muerte aproximada de su hija pero cree que ocurrió temprano porque cuando la encontró estaba fría; también supone que el responsable estuvo vigilando su casa y en cuanto salió a trabajar, entró a atacar a Renata Martinely cuando aún estaba dormida. Todas son suposiciones porque la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) no le ha informado de ningún avance.

La misma noche del 29 de noviembre, la familia de la niña denunció el feminicidio, y en ese momento las autoridades le dijeron a la mamá que no divulgara información del caso “para no entorpecer la investigación” pero fueron amigos, compañeros de la escuela y conocidos de Renata quienes a través de redes sociales comenzaron una campaña con #JusticiaParaRenata y en memoria de su amiga bailarina.

“Los primeros días, autoridades municipales nos dijeron que nos iban a dar seguridad las 24 horas del día, también un apoyo al desempleo y a la vivienda pero no tengo nada de eso; la seguridad me la quitaron y no me explicaron por qué, y de la Fiscalía de Feminicidios lo que recibí fue recursos para los gastos funerarios”.

Karen Reyes
Renata bailando

La familia no sabe si está detenida la investigación o la Fiscalía no les quiere dar información, los mantienen al margen de las diligencias, les dicen que están al pendiente del caso y que siguen trabajando. Para Karen, el posible responsable es su expareja, un hombre de quien se separó 5 meses antes del feminicidio porque intentó grabar sin su consentimiento a Renata, pero esta línea tampoco se está investigando.

Una denuncia por acoso sexual antes del feminicidio de Renata

Cuando denunció, Karen contó que 5 meses atrás su expareja intentó grabar a Renata cuando se bañaba pero la adolescente se dio cuenta y le avisó a su mamá. Juntas fueron a denunciar por acoso sexual a este hombre ante la Agencia Especializada en Violencia Familiar, Sexual y de Género (Ampevis) de Ixtapaluca; con este antecedente, pensó que sería más fácil la investigación pero la respuesta fue que no tenía pruebas para señalarlo y no podían indagar más.

“Nosotras vivíamos con este hombre que no es el papá de Renata; ya llevábamos cinco años de relación estable pero un día mi hija me marcó y me dijo que cuando se iba a bañar encontró un teléfono en el baño. Era el celular de esta persona que entró antes y lo acomodó en un lugar con ángulo para grabarla”.

Karen Reyes

Tras la agresión, ambas dejaron esa casa y se mudaron a otro domicilio de la misma colonia Chocolines; de su denuncia se desprendió una medida de protección para ambas y, aunque la Ampevis también solicitó la declaración de la adolescente de 13 años de edad y entregaron como evidencia el video del celular, el caso nunca procedió.

Al denunciar, la familia de Renata creyó que habían conseguido frenar una amenaza, “pensé que ya había rescatado a mi hija y que no había pasado nada grave pero cinco meses después ocurre el feminicidio y a tres meses aún no hay justicia. Es cuando entiendes porque la gente hace justicia por su propia mano”. A este hombre, la Fiscalía no lo ha citado para entrevistarlo y deslindarlo de responsabilidades, tampoco por el caso anterior de acoso sexual.

Renata quería ser bailarina, veterinaria y activista

Renata Martinely Luna Reyes cursaba el segundo año de secundaria en la Escuela Gabriela Mistral de Ixtapaluca; era una alumna aplicada, tranquila, centrada pero que sobre todo, le gustaba mucho bailar que incluso su sueño era convertirse en bailarina profesional y quería ingresar a una escuela de Bellas Artes.

“Mi hija era superhumana, quería apoyar a las personas en situación de calle con quienes se encontraba, era muy empática. También pensó en estudiar veterinaria por los perritos de la calle y quería tener un asilo para personas adultas mayores; todos esos temas la ocupaban, yo pienso que si no me la hubieran quitado, iba a hacer mucha labor social mientras realizaba su sueño de ser bailarina”.

Karen Reyes
Renata

La alegría de Renata impactó a todas las personas que conoció; en los cumpleaños, ella era la que organizaba todo, la pieza clave para los festejos. Algo que recuerda constantemente Karen es el número de asistentes al velorio de su hija, pues a pesar de la pandemia de coronavirus Covid-19, personas hicieron fila para dar el pésame; había gente en la calle y todos llegaron con alguna veladora, flores, café o azúcar.

“Me dicen que siga con mi vida pero cómo si el asesino de mi hija no tiene una cara; cómo sigo si no tengo de quien cuidarme, todo el tiempo estoy intranquila porque plena luz del día la mataron. Cómo puedo retornar a mi vida si no sé de quién cuidarme. Yo sé que nada me va a regresar a mi hija pero con justicia puedo evitar que otra familia sufra lo mismo”.

Karen Reyes

Por ahora, la mamá de Renata continuará difundiendo las omisiones en su caso para tener acceso a la justicia y la demanda participará en una marcha este 7 de marzo por el Día Internacional de las Mujeres; espera que pronto la Fiscalía Especializada en Feminicidios de Barrientos le dé una respuesta respecto al antecedente de violencia contra su hija, quien el 22 de julio próximo cumpliría 14 años