México.- 19 niños fueron presentados por la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF) como policías comunitarios en Guerrero tras la masacre de 10 músicos indígenas en el municipio de Chilapa.
Los menores cuyas edades van de los 6 a los 15 años, aparecieron en un video armados, tras ser capacitados para la defensa de sus pueblos y familias frente los grupos delictivos, principalmente por el acoso de Los Ardillos en 16 comunidades de la CRAC-PF.
La presentación de los niños ocurrió al mediodía de este miércoles 22 de enero tras una marcha por la comunidad de Alcozacán en la que participaron 2 mil personas, bloqueada desde hace 6 días tras la masacre de los 10 músicos en el municipio de Chilapa, Guerrero. La marcha tenía el objetivo de exigir la entrega de 5 de los 10 cadáveres de los músicos asesinados, según el reporte de Proceso.
De acuerdo con el consejero de la CRAC-PF, Bernardino Sánchez Luna, los menores de edad fueron capacitados en el uso de armas y evitar ser ‘levantados’ o secuestrados por la incapacidad y desinterés del gobierno estatal para defender a las comunidades indígenas del asedio de los grupos de la delincuencia organizada.
Niños quisieran seguir estudiando pero narco no los deja
17 de los 19 niños provienen de la comunidad de Ayahualtempa en el municipio de José Joaquín de Herrera; los restantes dos son de Xochitempa en Chilapa, reporta el diario El Sur.
El coordinador de la CRAC-PF, David Sánchez Luna, informó que las autoridades de los 16 pueblos agrupados en la organización comunitaria, coincidieron en no retirar el bloqueo hasta que el presidente AMLO y el gobernador guerrerense, Héctor Astudillo Flores, resuelven las 29 demandas que plantean desde agosto de 2019.
Según Bajo Palabra, por lo menos 3 de los 19 niños son hijos de víctimas de homicidio doloso perpetrado durante los últimos años durante enfrentamientos entre la policía comunitaria y Los Ardillos; los menores reclutados de mayor edad portan escopetas calibre 22.
Según el consejero de la CRAC-PF, aunque el deseo de los niños sea continuar estudiando al concluir su educación primaria, para hacerlo deben trasladarse a Hueycantenango, una zona controlada por el grupo de Los Ardillos, por lo que prefieren afiliarse a la policía comunitaria, razón por la cual afirma que son “olvidados” que sólo sirven cuando llega la temporada electoral.