Integrantes del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota (Cecop) denunciaron que durante el desarme de la Policía Comunitaria, el 7 de enero en La Concepción, Acapulco, la Policía del Estado cometió “una masacre” y sembró evidencias.

En asamblea efectuada ayer en el poblado Amatillo, en los bienes comunales de Cacahuatepec –en la zona rural de Acapulco–, unos 20 comuneros aseguraron haber atestiguado la irrupción de policías estatales después de las 11 horas del 7 de enero en La Concepción, que concluyó con la aprehensión de 38 campesinos, miembros del Cecop y policías comunitarios.

En la reunión donde se presentaron testimonios a reporteros y representantes del Centro de Derechos Humanos Tlachinollan sobre los hechos ocurridos, demandaron al gobierno la liberación de las 25 personas que siguen detenidas, entre ellas el vocero del Cecop, Marco Antonio Suástegui Muñoz, y el esclarecimiento de los hechos violentos que dejaron 11 muertos.

Los uniformados intervinieron alrededor de las 11:30 porque aproximadamente entre las 2:30 y las 3 ocurrió un enfrentamiento entre civiles armados y comunitarios en La Concepción, con saldo de ocho muertos, dos de ellos comunitarios.

Mujeres señalaron que las clases están suspendidas en Cacahuatepec desde los enfrentamientos en La Concepción.

“Fue un atentado al Cecop, no se vale que nos hayan atacado de esa forma, lo que vivimos fue una masacre del gobierno estatal, fue la Policía Estatal la que disparó, nada de la Policía Comunitaria, no culpo a los ministeriales, no culpo a los militares, fue la estatal, porque fue el gobierno del estado”, afirmó un campesino que fue uno de los 38 detenidos y luego liberado.

Con información de Centro de Derechos Humanos Tlachinollan y La Jornada.