México.- El ingreso de niños y adolescentes a la Policía Comunitaria de Chilapa, Guerrero, es un “acto de desesperación” por parte de dichas organizaciones debido al contexto de violencia e inseguridad que viven las comunidades de la región de la montaña, según explicaron voceros de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC).

En conferencia de prensa, un coordinador de la CRAC-PC respaldado por el vocero Gonzalo Molina, dijo que el reclutamiento de niños es responsabilidad del Estado mexicano por no brindar las condiciones necesarias de seguridad en las comunidades de Chilapa.

“Al no recibir apoyo de las autoridades para combatir al crimen organizado, los pueblos tienen que armar a hombres, mujeres y hasta a los niños, porque la situación es muy delicada, son ofensivas muy duras las que reciben. No creemos que sea reclutamiento forzado, porque es más un acto de desesperación”.

Coordinador de la CRAC-PC

Por su parte, Gonzalo Molina dijo que en varias zonas de Guerrero se ha denunciado por años la incorporación de grupos de la delincuencia organizada en comunidades, acciones que no han sido atendidas. Por lo que los pueblos ven como única alternativa defenderse “con todo lo que tengan”.

Gonzalo Molina, vocero de la CRAC-PC.

Expresó que dentro del estado hay diferentes zonas autónomas que se han integrado a la CRAC como Chilapa, donde hace unos días integrantes del grupo “Los Ardillos” asesinaron a 10 músicos indígenas. Según Molina, este crimen ocasionó que la población tome su última alternativa que es armarse.

“Matarles a 10 miembros de su pueblo representa un golpe muy duro. Cada Casa de Justicia es autónoma, y nosotros respetamos las decisiones de Chilapa. Lo que sí decimos es que no arman a niños porque quieran sino que es una necesidad obligada”.

Coordinador de la CRAC-PC

Gonzalo Molina detalló que la Casa de Justicia de El Paraíso que él dirige no adiestra a menores de edad, pero dijo que masacres como la de Chilapa deja a niños que ven a sus papás muertos sin recibir justicia por lo que su acercamiento a la Policía Comunitaria es una muestra de llamamiento al Estado.

Ayer 19 niños fueron presentados por la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF) como policías comunitarios, luego de la masacre de 10 músicos indígenas. Aparecieron armados y capacitados para la defender a sus pueblos.

El líder de la CRAC-PC denunció que diversas comunidades del estado de Guerrero siguen siendo blanco de hostigamiento y amenazas por parte de grupos armados y gobiernos locales que buscan desplazarlos de sus territorios para conseguir los recurso naturales que protegen en la región de la montaña.