Marisa Mendoza, esposa de Julio César Mondragón, normalista de Ayotzinapa, que fue asesinado tras el ataque armado que sufrieron estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, la noche del 26 de septiembre en Iguala y cuyo cuerpo fue localizado con el rostro desollado, cerca de la zona industrial de aquel municipio, exigió a la Procuraduría General de la República (PGR) atraer este caso.
“Toda la familia exige que el caso sea atraído por la PGR, porque está en el estado de Guerrero, cuando no debe de ser así y debe de atraerlo la PGR, para que empiecen las investigaciones y no sea investigado nada más como homicidio calificado sino como lo que es un Crimen de Estado y un crimen de Lesa Humanidad” señalo.
Entrevistada al finalizar una ceremonia donde se rindió un homenaje a su pareja se dijo confiada en que la muerte de Julio Cesar logre generar un cambio en el país.
“Esperemos que haya un cambio realmente, que la muerte de Julio Cesar no quede en el recuerdo, sino que haya un cambio en México.”
Ante este trágico suceso, Marissa sentenció que será la justicia divina la responsable de juzgar a los criminales que asesinaron a su esposo.
“Habrá justicia divina, yo se que Dios existe, así como Julio me lo dijo con sus palabras, que cuando lo pensará a él me acercará a Dios y el ahí iba a estar, Solamente se que Dios existe y Dios hará justicia, aunque no se haga aquí en la tierra pero allá arriba nadie se salva.”
Por último agradeció las muestras de solidaridad de la sociedad.
“Me siento muy agradecida y muy bendecida por Dios, por todo este apoyo tanto de los padres de familia, como de la sociedad.” concluyo