Toluca, Estado de México.- En el Estado de México al menos siete cuerpos de agua, entre presas y lagunas, presentan severos índices de contaminación, informó el especialista Bonifacio Pérez Alcántara.
Indicó que estos cuerpos de agua son ignorados porque no tienen el realce turístico de Valle de Bravo, aunque ponen en riesgo la salud de quienes consumen agua de estos sitios.
En entrevista, el investigador de la Facultad de Geografía de la Universidad Autónoma del Estado de México advirtió que de no atender este problema, existe un riesgo social permanente.
Manifestó que los municipios de Colorines, Santo Tomás, José Antonio Alzate, Vicente Guerrero, Zumpango y Chimalhuapan, en Almoloya del Rio, las lagunas están contaminadas por carecer de un sistema de drenaje natural para depurar el agua.
Expuso que el deterioro se debe a la cantidad de residuos sólidos arrojados por turistas, además de la erosión de los suelos, deforestación constante en la cuenca Valle de Bravo-Amanalco y el desgaste de los suelos durante la temporada de lluvias, pues arrastra materiales contaminantes.
Asimismo, el especialista dijo que el alga y el lirio acuático es un mecanismo de defensa del agua para procesar contaminantes y depurarse, que se propaga cuando el proceso natural es insuficiente, perdiendo la capacidad de autodepuración.
“Las presas regulan las condiciones climáticas del ecosistema, por eso la necesidad de crear un esquema de coordinación entre los gobiernos, para establecer mecanismos de protección para las presas mexiquenses, que hasta el momento se han descuidado”, dijo el investigador.