México.-El maestro Julián Ramírez es una de las personas golpeadas por la policía municipal en el palacio municipal que se encuentra en Cancún, durante las protestas por el feminicidio de Alexis.
A través de un video, que él mismo grabó, se constata que el maestro de Alexis fue detenido, sin embargo, no se ve clara la imagen por el movimiento brusco de la cámara.
En el mismo video, el joven grita que Alexis era su alumna y a la manifestación fue acompañado de estudiantes.
“¡Mataron a mi alumna, desgraciados!”
Julián Ramírez
Un video en redes sociales muestra el momento en que dos policías armados le llegan por la espalda para detenerlo.
“¡No pueden contestar a toletazos y a balazos, están tutelados por Derechos Humanos! ¿Ok?¡No mamen!” grita el joven, cuando uno de los policías lo agarra del cuello y de un brazo y junto con otro lo empuja hacia donde están los otros elementos de seguridad que se lo llevan al palacio municipal.
Aunque Julián intenta zafarse, otros policías se acercan y se lo llevan para detenerlo. En el lugar hay integrantes de la Guardia Nacional que no hacen nada.
{username} (@AlfredoLecona) November 10, 2020
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo escribió un tuit a las 9:51 de la noche en el que aseguraba que no había ninguna persona detenida en los municipios de Benito Juárez, Solidaridad, Othón P. Blanco, ni Felipe Carrillo Puerto.
En otro video se muestra el momento en que Julián, con una venda en la cabeza, y otras detenidas son puestas en libertad.
La Comisión de Derechos Humanos de Quintana Roo informó que en total se detuvieron a ocho personas y se atendieron a seis por heridas.
{username} (@Manolo__CL) November 10, 2020
A través de sus redes sociales, el joven informó a las 5 de la mañana que ya estaba en su casa, pero los policías le robaron su celular.
Ayer decenas de personas se manifestaron en la Fiscalía Central de Quintana Roo y en el palacio municipal, que se encuentra en Cancún, para protestar contra los feminicidios, entre ellos el de la joven Alexis. Sin embargo, policías reaccionaron echando balazos a los manifestantes.
El gobernador Carlos Joaquín, la presidenta municipal Mara Lezama y el jefe de la policía estatal, Alberto Capella, se deslindaron de haber dado la orden de represión.