En un comunicado conjunto, las gobernadoras y gobernadores de Morena salieron en defensa de los libros de texto de la SEP y en contra de Marko Cortés, a quien con compararon con Adolfo Hitler, por pedir que se destruyan los materiales.
En una entrevista con Ciro Gómez Leyva en su programa por la mañana, Marko Cortés hizo un llamado a los padres de familia a destruir los libros de texto de la Secretaría de de Educación Pública (SEP), así como arrancar hojas con las que los padres no estén de acuerdo.
Dicha solicutd generó una polémica entre los seguidores de la Cuarta Transformación, así como los dichos del conductor Javier a la Torre sobre los contenidos de los libros de texto.
Los nuevos libros de texto de la SEP están causando controversia debido a que acusan que en sus contenidos están mal, así como la eliminación de materias o la imposición de ideologías.
Gobernadores de Morena comparan a Marko Cortés con Adolfo Hitler por pedir destruir libros de textos de la SEP
En su comunicado, los gobernadores de Morena compararon a Marko Cortés, dirigente del Partido de Acción Nacional (PAN), con Adolfo Hitler de Alemania y Augusto Pinochet de Chile, por pedir destruir libros de textos de la SEP.
Respecto a las declaraciones de Marko Cortés, los gobernadores de Morena advierten que no se podía esperar mucho de la “derecha conservadora” del país, a los que acusan de retrógradas.
Agregaron que siempre que se quiso “impedir el avance democrático, cultural, y humanístico de la sociedad se impulsó la destrucción de libros”.
Gobernadores de Morena acusan a los conservadores de querer que siga la ignorancia
También acusaron que los conservadores quieren dejar pasar por alto los pasajes de la historia en los que no son beneficiados.
Aseguran que los seguidores de la derecha quieren impedir la distribución de los libros de texto para que siga la ignorancia y para que los niños puedan ser manipulados, además de oponerse al desarrollo integral de la niñez desde el conocimiento científico, histórico, cultural y humanístico.
Finalmente acusaron que la impresión de los libros de texto de la SEP era un negocio para los otros gobiernos.