Onésimo Cepeda, obispo emérito de Ecatepec, murió la noche del lunes 31 de enero, a unas semanas de haberse contagiado de Covid-19.
Óscar Roberto Domínguez Couttolenc, actual obispo de Ecatepec, dio a conocer el fallecimiento de Onésimo Cepeda Silva a través de un comunicado:
“La Diócesis de Ecatepec comunica con gran pesar al Pueblo de Dios, que Mons. Onésimo Cepeda Silva, Obispo Emérito de esta Iglesia Particular, ha sido llamado a la casa del Padre Celestial este 31 de enero a las 22:50 horas”
Óscar Roberto Domínguez Couttolenc, obispo de Ecatepec
Diócesis de Ecatepec anuncia novenario por el descanso de Onésimo Cepeda
En el documento, Domínguez Couttolenc ofreció sus condelencias a los familiares y demás seres queridos de Onésimo Cepeda.
“Invitamos a todos los fieles a elevar nuestras plegarias para encomendar su alma a nuestro Padre Misericordioso y, a la vez manifestamos nuestras condolencias a sus familiares y amigos, deseando para ellos el consuelo y la paz”
Óscar Roberto Domínguez Couttolenc, obispo de Ecatepec
Asimismo, destacó los 16 años de ministerio episcopal que ejerció Onésimo Cepeda y anunció que en una fecha próxima a anunciar, se realizará un novenario por su eterno descanso:
“Informamos que se dispondrá un novenario por su eterno descanso en toda la Diócesis, comunicándose posteriormente el día y la hora de la celebración exequial en nuestra Santa Madre Iglesia Catedral”
Óscar Roberto Domínguez Couttolenc, obispo de Ecatepec
Onésimo Cepeda fue hospitalizado por Covid-19 a principios de enero
El 7 de enero, el obispo Domínguez Couttolenc informó que Onésimo Cepeda, de 84 años, fue ingresado a un hospital por complicaciones derivadas del Covid-19.
Dos días después, el estado de Onésimo Cepeda se agravó de tal forma que fue necesario intubarlo para mantenerlo con vida.
El procedimiento parecía haber favorecido la recuperación del obispo emérito de Ecatepec, pues en días posteriores su estado de salud se reportó como estable.
Desafortunadamente el Covid-19 parece haber provocado tal daño al cuerpo de Onésimo Cepeda que este lunes le provocó la muerte.
Casi un año antes, otro alto jerarca de la iglesia católica mexicana fue hospitalizado por Covid-19: el arzobispo emérito Norberto Rivera.
Fueron 48 días los que Norberto Rivera pasó en el hospital, 15 de ellos intubado. Por fortuna, el exarzobispo de la Arquidiócesis Primada de México logró recuperarse.
Fue así que a principios de marzo de 2021 Norberto Rivera recibió su alta médico y volvió a su casa para recuperarse de las secuelas del Covid-19.