Ricardo Anaya aseguró que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) quiere venganza y busca destruirlo, tras ser acusado de recibir sobornos para aprobar la Reforma Energética en 2014.
En entrevista con The Wall Street Journal, Ricardo Anaya, quien reveló que ahora vive en un departamento de 2 ventanas en Nueva York, Estados Unidos, acusó al presidente AMLO de ser autoritario y de emprender una persecución en su contra.
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“López Obrador es autoritario, es vengativo y quiere destruirme”, aseguró Ricardo Anaya.
De acuerdo con el periódico estadounidense, Ricardo Anaya tiene programada una audiencia el lunes 8 de noviembre, en la que un juez decidirá si hay pruebas contra él para proceder con una orden de aprehensión.
Ricardo Anaya vive en un pequeño departamento en Nueva York
Tras ser denunciado de recibir sobornos en 2014 para aprobar la Reforma Energética de Enrique Peña Nieto, Ricardo Anaya huyó de México y actualmente vive en Nueva York.
Según The Wall Street Journal, Ricardo Anaya vive en un pequeño departamento, tras huir del país y acusar al presidente AMLO de una venganza política en su contra.
El pequeño departamento de Ricardo Anaya está sin muebles, tiene dos ventanas que dan a una pared de ladrillos y recientemente adquirió un colchón por Amazon.
Ricardo Anaya fue captado con gafas oscuras, cubrebocas y una gorra de béisbol azul esperando una camioneta de Amazon para que le entregará su colchón, detalló The Wall Street Journal.
Ricardo Anaya es acusado de recibir sobornos
La Fiscalía General de la República (FGR) investiga a Ricardo Anaya por posiblemente recibir un soborno para votar a favor de la Reforma Energética cuando era diputado.
Emilio Lozoya, exdirector de Pemex y en prisión preventiva por el caso Odebrecht, señaló a Ricardo Anaya como uno de los funcionarios que recibió sobornos.
La FGR asegura que un guardaespaldas de Emilio Lozoya entregó medio millón de dólares a Ricardo Anaya en el estacionamiento del sótano de la Cámara de Diputados.
Por el caso, Ricardo Anaya ha manifestado ser inocente y declaró que habría sido el soborno más estúpido de la historia.
“O compraron el voto de alguien que no tenía voto, o pagaron por un voto que emití meses antes”, señaló a The Wall Street Journal.