Desde su fundación en 1902, Cadillac siempre ha sido catalogada como una marca de autos que ofrece el máximo nivel de lujo en todos y cada uno de sus modelos.
De igual manera, dentro de su filosofía está el desarrollar autos que destaquen por su innovación y vanguardia, esto con el objetivo de marcar diferencia frente a sus competidores.
Si bien, Cadillac ha conseguido ser una marca de autos que sea catalogada como lujosa y vanguardista, en los últimos años ha ido a un nivel más alto de lo acostumbrado.
Primero, lo hizo con la más reciente generación de la Escalade y después con su primer modelo totalmente eléctrico: el Lyriq.
Ambos modelos aparecieron con una serie de innovaciones que han hecho que Cadillac sea todo un referente en lo que se refiere a vehículos de alta gama en la época de la transformación hacía movilidad eléctrica.
La primera SUV grande totalmente eléctrica de Cadillac
Siguiendo esta tendencia de ofrecer los modelos más innovadores, la marca de autos de lujo de General Motors ahora presenta la opción totalmente eléctrica de la Escalade, el SUV de tres filas más lujoso que existe en el mundo.
Aunque se reconoce como una versión eléctrica de la Escalade a gasolina, este nuevo modelo conocido como Escalade IQ ofrece un diseño exterior más portentoso y aerodinámico.
Por dentro, la arquitectura de este SUV eléctrico no solo contiene una apariencia sofisticada y materiales de lujo, sino también tecnologías avanzadas.
Una muestra de ello es la pantalla LED curva de 55 pulgadas que abarca todo el largo del tablero.
Escalade IQ: El modelo más poderoso en la historia de Cadillac
Pero además de destacar por el exterior e interior, este Escalade IQ aparece como el Cadillac más potente de las historia, debido a que los motores eléctricos superan a la Escalade V-Series y sus más de 680 caballos de fuerza.
- Potencia: 750 caballos de fuerza
- Torque: 785 libras-pie
- 0 a 100 km/h: en menos de 5.0 segundos
- Autonomía: 720 kilómetros
La producción regular de Escalade IQ está programada para el verano de 2024 en la planta de Detroit-Hamtramck en Michigan, y se espera que llegue a México a finales de ese mismo año.