México.- El pasado 8 de marzo familiares de víctimas de feminicidio y desaparición, junto a colectivas feministas y de derechos humanos, colocaron en una acera de avenida Juárez, justo frente al Palacio de Bellas Artes, un Antimonumento para visibilizar los feminicidios y el fenómeno de inseguridad y violencia contra las mujeres en México.
Frente a rumores de que la estructura no tenía permiso de levantarse, “ningún antimonumento empieza con permiso, por eso se llaman así. Lo que alegan es que es un lugar muy turístico y que se ve feo”, mencionó Bett activista y sobreviviente de feminicidio y secuestro, que cuida el antimonumento.
Formalmente, nadie se ha acercado a decir que quitarán el antimonumento, pero las activistas que lo cuidan han decidido protegerlo, reunir firmas e invitar a denunciar casos de violencia, hasta que se obtenga el permiso de mantenerlo.
De acuerdo con Bett, policías de diferentes corporaciones vigilan las actividades que se llevan a cabo en el planton formado en las inmediaciones del antimonumento de feminicidios pero “hasta que no esté reconocido por el Estado que es una Antimonumenta, nosotros no vamos a recoger el plantón”.
Al respecto del permiso, la activista dijo que familiares de las víctimas están buscando con diputados la obtención del permiso pero “no sabemos cuánto tarde”. Como parte de las actividades para que se reconozca el antimonumento, en el lugar las activistas informan a la gente el objetivo e invitan a tomar una foto de la “antimonumenta” y compartirlo en redes sociales con el #SeVaAQuedar.