México.- La Fiscalía General de la República (FGR) acusa de tráfico de personas a los dos defensores de derechos de personas migrantes, Cristóbal Sánchez e Irineo Mujica, que fueron detenidos en la Ciudad de México y en Sonora, respectivamente, el 5 de junio.
Cristóbal Sánchez, fundador del Colectivo de Cultura Migrante, fue arrestado afuera de su casa en la alcaldía de Xochimilco; mientras que Irineo Mujica, de la organización Pueblos Sin Fronteras, fue detenido en Sonoyta, Sonora.
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Adriana Salcedo, investigadora de la organización civil Movimiento de Justicia LIS, refirió que ambos activistas fueron detenidos por agentes ministeriales vestidos de civil, y posteriormente trasladados este jueves a Tapachula, Chiapas, donde serán procesados.
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Ramiro Sánchez, hermano de Cristóbal, afirmó que es la segunda ocasión que su hermano es detenido por las labores de activismo que realiza, y al mismo tiempo dijo que están decepcionados de la Cuarta Transformación, pues Ramiro “está viviendo un proceso infundado, inventado”.
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Detenciones por presión de Estados Unidos
Sánchez consideró que la detención de ambos activistas se deben a las presiones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hacia México; al igual que Adriana Salcedo, quien estas acciones son un intento de demostrar fuerza del Estado mexicano en frenar el flujo migratorio.
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Organizaciones de derechos humanos y de apoyo a los migrantes como el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez; la Casa de Acogida y Formación para Mujeres y Familias Migrantes; el Movimiento Migrante Mesoamericano y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano, denunciaron el arresto como “detención arbitraria” y cuestionaron lo que consideran “una forma de criminalización contra las personas defensoras de los derechos humanos de los migrantes”.
Con información de Reforma