México.- Integrantes del Colectivo Zapata Vive y la Red de Apoyo a Kenia Hernández instalaron un plantón frente a la Fiscalía General de la República (FGR) para exigir la liberación de la defensora y activista guerrerense Kenia Inés Hernández Montalván, detenida tras una protesta el 18 de octubre en una caseta de Puebla.
Luego de su detención, la activista fue ingresada al Centro de Reinserción Social de Almoloya, Estado de México, en lo que sería su segundo arresto en los últimos cuatro meses. El Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero denunció que se trata de “un montaje” contra la mujer pues la acusan sin pruebas de robar en un autobús.
{username} (@bettyastudillo) October 26, 2020
Los defensores de Kenia Hernández también señalaron que la detención se produjo con violencia y que los agentes vestían uniformes sin distintivo pero que se identificaron como integrantes de la Guardia Nacional; y consideran que la acusación es una estrategia para criminalizar a la mujer por su activismo social.
Esta orden de aprehensión fue solicitada por la Fiscalía del Estado de México y aceptada por el Juez de Control del Distrito Judicial de Toluca en el penal de Almoloya. Durante toda la semana pasada, colectivos y defensores realizaron manifestaciones para exigir su liberación y fue el pasado sábado 24 de octubre que se determinó que Kenia debía recuperar la libertad tras pagar una fianza de 30 mil pesos.
Lo anterior fue decidido por un juez de control de Almoloya; sin embargo, el Centro Zeferino Ladrillero y el colectivo Zapata Vive denunciaron que antes de que pudiera ser excarcelada por el cambio de medida cautelar para llevar su proceso en libertad, la FGR pidió una nueva orden de aprehensión en su contra por el delito de ataques a las vías de comunicación, según la Ley de Vías Generales de Comunicación.
Esta nueva orden de aprehensión fue aceptada por un juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio en el Estado de Guerrero y ejecutada la madrugada de ayer domingo 25 de octubre. Kenia Hernández sería trasladada a un penal federal de Acapulco pero debido a las amenazas en su contra en Guerrero, finalmente se informó que fue enviada a un centro de reclusión en Morelos.
Se espera que una primera audiencia por este nuevo delito en su contra suceda hoy 26 de octubre. Kenia Hernández es oficial de las Policías Comunitarias de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias en el Estado de Guerrero, partícipe del Movimiento por la Libertad de los Presos Políticos y dirigente del Colectivo Libertario Zapata Vive.
El primer arresto en su contra durante este 2020 ocurrió el pasado 6 de junio, cuando policías estatales y ministeriales la detuvieron junto a tres menores de edad en la caseta Hortaliza-Valle de Bravo en el Edomex. Por ello, permaneció privada de libertad hasta el 11 de junio, cuando una jueza de Ecatepec le concedió seguir con su proceso en libertad. La acusación era robo a un vehículo particular.
Los colectivos y organizaciones que acompañan a Kenia acusan criminalización del activismo en contra de la mujer y reiteran que la exigencia principal es su liberación y que sí hubiese proceso en su contra, pueda llevarlo en libertad. También han referido irregularidades durante las detenciones e investigaciones.