México.- El Partido del Trabajo (PT) en la Cámara de Diputados propuso la desaparición de las Afores para que en su lugar, el Estado administre los fondos para el retiro al presentar la expedición de la denominada Ley de Pensiones.
La iniciativa que se enlistó en la Gaceta Parlamentaria acusa a las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) de enriquecimiento y el cobro de altas comisiones a trabajadores, por lo que los fondos que manejan pasarían ahora a la administración del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) e Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
La propuesta no es original del PT, fue retomada de la Confederación de Jubilados, Pensionados y Adultos Mayores de la República Mexicana donde se propone la eliminación del Régimen de Capitalización Individual –abrogación de Afore y Siefores- para que se restituya el Régimen Solidario de Reparto vigente en las leyes del IMSS e ISSSTE de 1973 y 1983.
El Partido del Trabajo afirma que de esta forma las pensiones de los trabajadores serán “dignas” y dejarán de ser una mercancía que beneficie a los empresarios, a quienes acusan de aprovechar la falta de preparación e información tanto del gobierno federal como de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
Los diputados petistas argumentan que la ciudadanía tiene la convicción de que las Afores deben desaparecer, por lo que promueven la Ley de Pensiones que contempla 10 artículos junto a normas transitorias, señala El Universal.
A modo de ejemplo, citan el caso del cobro de comisiones a cuentas inactivas dado que el trabajador deja de generar ingresos, mientras que con base en el Artículo 14 de la Constitución, ninguna persona puede ser privada de propiedades, posesiones o derechos sin que exista un juicio previo.
El PT también apuntó la contradicción que existe cuando en el caso de que el trabajador pierda el empleo o se vuelva independiente, se le impide el retiro de sus ahorros porque la edad de jubilación es de 65 años.
El partido acusa a las Afores de privatizar y transformar tanto los derechos como los recursos sociales, por lo que llama a que el Estado retome un rol activo en el crecimiento económico, la ampliación del mercado interno, los empleos y el salario dignos.