México.- El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) y madres de víctimas de feminicidio en México lanzaron la campaña “Nos van a ver juntas” contra la violencia feminicida y ante la nula respuesta de autoridades para garantizar justicia y acciones contundentes que frenen estas violencias.
Con tres cortometrajes sobre feminicidios llamados Indignación, Memoria y Esperanza, las familias de víctimas junto con organizaciones civiles defensoras de los derechos de las mujeres buscan fortalecer las redes de apoyo y lazos de sororidad entre la sociedad para conseguir justicia, verdad y garantías de no repetición en casos de asesinatos violentos de mujeres.
“Queremos caminar libres porque luego de las violencias, las familias se han encontrado con impunidad y discriminación, revictimizan, responsabilizan de la violencia a las mujeres. Las autoridades no previenen, no investigan, violan los procesos legales luego de que los agresores decidieron sobre las vidas de las mujeres y lejos de investigar con perspectiva de género, vuelven a vulnerar nuestro derecho a una vida libre de violencia”.
María de la Luz Estrada, OCNF
María de la Luz Estrada, coordinadora del OCNF expresó el pronunciamiento de la organización y condenó que en México las familias sigan enfrentándose a un aparato del Estado que no imparte justicia. También dijo que la campaña es para darles identidad a las mujeres asesinadas, redignificarlas y recordarlas como personas a las que les fue arrancada su voz.
{username} (@veruelizondo) March 5, 2020
“La indignación es la que nos tiene aquí paradas. La campaña también es para que la sociedad de sensibilice y se involucre; hacemos un llamado a no callar y actuar de frente al patriarcado en colectividad que es la única manera de avanzar y por eso NOS VAN A VER JUNTAS”.
María de la Luz Estrada, OCNF
Las cifras de la violencia feminicida
La coordinadora de la organización retomó algunas cifras oficiales para respaldar los motivos por los que las mujeres van a salir a la marcha de este 8 de marzo y parar el 9; pues tan solo de 2015 a 2019, 15 mil 804 mujeres fueron asesinadas, de los cuales solo el 23% se investigaron o siguen como feminicidios.
Otros números que son razones de las protestas es que la cifra de mujeres desaparecidas pues tan solo en 2019, según fiscalías estatales, 7 mil 654 mujeres y niñas desaparecieron, de las cuales 85 han sido localizadas sin vida y 2 mil 043 siguen sin ser localizadas.
“NOS VAN A VER JUNTAS porque en México nos están matando. Cada día, diez mujeres son asesinadas por hombres porque creen que pueden hacerlo sin consecuencias: callarnos, violarnos, desaparecernos, arrebatarnos la vida por celos, por odio, por abuso de poder, por el hechos de ser mujeres”.
María de la Luz Estrada, OCNF
Durante la presentación de los 3 videos, los familiares de víctimas de feminicidio demandaron que cuántas veces más tendrán que escuchar el mismo discurso de los gobierno y refrendaron su participación en la campaña que busca recordar a las mujeres, niñas y adolescentes asesinadas como personas con sueños y no olvidarlas.
Sobre la marcha del 8 de marzo y el paro nacional de mujeres del 9 de marzo refirieron que “no estamos todas pero no estamos solas”, y por ello invitaron a las mujeres a sumarse a las protestas y al grito de justicia contra la discriminación, impunidad, corrupción que permea en delitos que afectan a las mujeres.
Nos van a ver juntas
En la presentación de la campaña estuvieron presentes Araceli Mondragón, mamá de Abigail Guerrero Mondragón, asesinada el 11 de diciembre de 2016; Mónica Borrego, mamá de Yang Kyung María Sun Borrego, asesinada el 21 septiembre de 2014; Margarita Alanís, mamá de Campira Camorlinga Alanís, asesinada el 31 de diciembre de 2016; Patricia Becerril, mamá de Zyanya Estefanía Figueroa Becerril, asesinada el 14 de mayo de 2018.
También Araceli Osorio, mamá de Lesvy Berlín Rivera Osorio, asesinada el 3 de mayo de 2017; Lorena Gutiérrez, mamá de Fátima Quintana Gutiérrez, asesinada el 5 de febrero de 2015; e Irinea Buendía, mamá de Mariana Lima Buendía, asesinada en 2010 y con una sentencia histórica.
Todas juntas exigieron a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como a los gobierno estatales y municipales, y a la Fiscalía General de la República (FGR) cumplir con su obligación de garantizar una vida libre de violencia contra las mujeres.