México.- En tanto resuelve su situación jurídica por las acusaciones de lavado de dinero y delincuencia organizada, Juan Collado anunció su renuncia a la presidencia del Consejo de Administración de Libertad Servicios Financieros, mejor conocida como Caja Libertad.
En un comunicado, la entidad de ahorro y crédito, que opera bajo el esquema de una sociedad financiera popular (Sofipo), indicó que Collado Mocelo dejó de formar parte de su mesa directiva y que será en los próximos días que se designe a su sucesor.
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De acuerdo con la empresa, en sus 59 años de servicio se han caracterizado por ofrecer soluciones integrales a clientes, inversionistas y colaboradores, además de que sus funciones y operaciones son supervisadas y aprobadas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Juan Collado fue detenido ayer en un restaurante de Las Lomas de Chapultepec, en cumplimiento de una orden de aprehensión por su posible comisión de los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
La indagatoria en torno al caso establece que Collado integró una red financiera ilícita, que a través de empresas fantasma simuló la compra-venta de inmuebles. La imputación en contra del polémico abogado deriva de una denuncia presentada por el empresario Sergio Hugo Bustamente, quien lo acusó de ser el autor material de la venta de un predio 3 mil 877 metros cuadrados en la ciudad de Querétaro.
El inmueble fue vendido por Operadora de Inmuebles de Centro a Caja Libertad en una transacción superior a los 156 millones de pesos, de los cuales 24 millones representaron una ganancia directa para Collado.
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En su testimonio, Bustamente señaló a los expresidentes Carlos Salinas de Gortari y Enrique Peña Nieto, así como al actual gobernador del estado de Querétaro, Francisco Domínguez y el coordinador de los senadores del Partido Acción Nacional (PAN), Mauricio Kuri, como los verdaderos propietarios de Caja Libertad, a través de la cual supuestamente se destinaron más de 100 millones de pesos para la campaña de 2015 de Domínguez Servién.
Con información de La Jornada