México.-  A tan solo un día del primer aniversario del sismo del 19 de septiembre, la narrativa no oficial coincide en que la falta de labores de reconstrucción ha dejado a miles de personas viviendo en condiciones de mezquindad a la espera de soluciones reales que garanticen su seguridad personal y la de su patrimonio. 

Ante la falta de acciones gubernamental, distintas organizaciones de la sociedad civil formadas a partir de la emergencia derivada de los sismos del 7 y 19 de septiembre, se han dado a la tarea de trabajar de manera directa con los afectados, constatando la falta de responsabilidad de las autoridades con la población rural y urbana, así como, con la transparencia sobre el destino final de los recursos públicos para abatir la emergencia.

Instancias no gubernamentales como Infrarural y Documenta 19s: desde abajo, exponen que a lo largo del año ha resultado evidente la falta de censos y diagnósticos de la situación, por lo que los criterios de selección de beneficiarios de los apoyos gubernamentales siguen arrojando una aparente discrecionalidad y corrupción en la distribución de recursos,  además de una falta de sensibilidad  ya que los apoyos no han sido significativos pese a que muchas persona han perdido la totalidad de su patrimonio. 

La perspectiva de las organizaciones coincide con la de la Comisión Nacional de Derechos Humanos que el día de hoy, reporta en un comunicado de prensa que las respuestas de las instituciones públicas han sido  incompletas y deficientes;  no han dado avances sustantivos en la determinación de las causas reales que motivaron los daños o el colapso de inmuebles dañados por el sismo. 

Para Infrarural uno de los grandes impedimentos  para las labores de reconstrucción es la falta de comprensión del concepto de familia extensa, ya que, los apoyos suelen ser otorgados para una sola familia a pesar de que en algunas zonas rurales suele ser común que un solo previó sea habitado por varias familias. Insisten en la urgencia de realizar diagnósticos para conocer la situación de las personas que comenzaron a construir sus casas con apoyos de FONDEN, la sociedad civil o sus propios medios. 

Asimismo, llama a responder a la urgencia de brindar atención psicológica y social que permitan reconstruir el tejido social de las comunidades y que a su vez reactive las actividades económicas a partir de proyectos de enfoque comunitario y participativo. 

En este sentido, la CNDH también hace un enérgico llamado a las autoridades a asumir su responsabilidad para que se de celeridad a la atención de víctimas,  incluyendo la necesaria consolidación de una cultura integral de prevención de desastres. 

Cabe destacar que la Comisión Nacional ha iniciado 375 expedientes, 4 oficios y 371 derivados de quejas presentadas de manera individual y colectiva por parte de padres de familias y organizaciones de la sociedad civil. A pesar de ello,  se sigue sin obtener la información necesaria para responder a las incógnitas del sismo que afecto a los estados de Chiapas, Guerrero, México, Morelos, Oaxaca, puebla, Tlaxcala y Ciudad de México.