México.- La Secretaría de Cultura de México envió una carta a la marca australiana Zimmermann donde la convocó a trabajar de forma ética con las comunidades indígenas, luego de que se denunciara en redes sociales que un vestido había sido plagiado a partir de un hupil tradicional de la comunidad mazateca de Huautla de Jiménez, Oaxaca.
La titular de la dependencia, Alejandra Frausto, se pronunció a favor del respeto y la protección del patrimonio cultural inmaterial de los pueblos y comunidades indígenas sin socar su “identidad y economía” apelando a un comercio justo que coloque en igualdad de condiciones a los creadores indígenas, empresarios y diseñadores.
En la carta de México se explica que la marca australiana publicó la túnica Riders Panelled Tunic Dress dentro de la colección ZimResortSwim, misma que retoma elementos de las prendas elaboradas por mujeres de Huautla de Jiménez.
{username} (@cultura_mx) January 15, 2021
Sí bien reconoce que el retiro de la venta al público de la pieza y la petición de disculpa en redes sociales representan “camino positivo”, se debe apelar a responsabilidad social y el prestigio internacional que precede a la marca Zimmermann para evitar que se repita una afectación a la cultura mexicana.
Por su parte, la Secretaría de Cultura indica que la carta forma parte de las acciones del gobierno en defensa del patrimonio cultural de las comunidades indígenas para evitar el plagio de elementos de identidad por parte de empresas nacionales e internacionales.
México ha atendido 2 casos de plagio a comunidades indígenas
El caso de plagio de la marca australiana Zimmermann es el segundo que atiende la Secretaría de Cultura mexicana, el primero fue el del uso de un diseño purépecha de la diseñadora francesa Isabel Marant para su colección Otoño-Invierno, acusándola de “apropiación cultural”.
El gobierno de México acusó a la diseñadora francesa de privatizar una propiedad colectiva que posee elementos culturales con orígenes documentados, por lo cual se hizo un llamado a discutir el tema de la protección de los derechos que pertenecen a las comunidades purépechas.