México.- Aeroméxico comunicó a la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA), su propuesta para despedir a más de mil sobrecargos que actualmente se desempeñan dentro de su estructura, al asegurar que dicha medida forma parte de su programa para superar la crisis por el coronavirus Covid-19.
En un comunicado, ASSA dio a conocer a los más de 2 mil 700 sobrecargos de Aeroméxico la propuesta presentada por la compañía, misma que consideró como "muy fuerte" debido a que además de la eliminación de los mil puestos de trabajo, se advierte un mismo sistema de rotación de personal, pero con menor ritmo al actual, y una revisión de las condiciones generales del Contrato Colectivo de Trabajo.
La organización sindical aseguró que su Comité Ejecutivo analizará la propuesta y en los próximos días se reunirá con dirigentes de la compañía para una reunión preliminar.
No será sino hasta que se convoque a una Asamblea General Extraordinaria de manera virtual, que se emita un posicionamiento oficial del gremio sobre la advertencia de Aeroméxico. ASSA pidió a sus agremiados mantener la calma y recordó que en caso de que se recurra al recorte de colaboradores, éste se deberá apegar a lo establecido en la Ley Federal del Trabajo y afectar a los trabajadores con menos antigüedad.
Aeroméxico se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos
En junio, Aeroméxico decidió acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos (EU) para iniciar un proceso de reestructuración financiera. Como parte de ello, la empresa obtuvo la aprobación para un financiamiento de mil millones de dólares por parte de Apollo Management Holdings, que puso el acuerdo de rescate estableció varias condiciones, como la reducción permanente de costos laborales.
El Capítulo 11 es un proceso legal que permite a las empresas reestructurarse financiera y operativamente bajo la supervisión de un tribunal estadounidense, protegiéndolas del riesgo de demandas de acreedores mientras continúan operando.
Aeroméxico fue la tercera gran aerolínea de Latinoamérica en recurrir a la ley de bancarrota luego que LATAM y Avianca, las dos mayores del continente, hicieran lo propio golpeadas por la parálisis de la aviación comercial generada por la pandemia.