México. - La minera canadiense, Americas Gold and Silver respondió a los señalamientos que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y rechazó que existan elementos para que el gobierno federal le cancele su concesión en la mina de San Rafael en Cosalá, Sonora.
De acuerdo con lo indicado por la propia minera a través de un comunicado, durante más de un año un grupo de extorsionadores de los que acusan, estarían vinculados al crimen organizado de la zona, ha tenido bloqueada la mina.
De la misma forma, señaló que los responsables del bloqueo en la mina han logrado engañar a la opinión pública al justificar el bloqueo que mantienen, se debe a un falso conflicto laboral entre sindicatos.
Minera canadiense se dice dispuesta a que gobierno investigue los hechos
Debido a dicha situación, la minera canadiense señaló que si el gobierno así lo requiere, puede llevar a cabo una revisión legal de las operaciones que se realizan, así como del bloqueo del que se insistió, se trata de una acción ilegal.
“Hasta la fecha no se ha presentado demanda o queja laboral alguna en contra de la compañía y ésta mantiene total disposición para abordar cualquier asunto en el marco del actual contrato colectivo de trabajo”
Americas Gold and Silver
Incluso, la minera canadiense indicó que se ha esforzado en erigirse como un buen socio e inversionista de México y de Cosalá durante más de 15 años, situación de la que se aseguró, cual continuará haciendo una vez que se resuelva el cierre a las instalaciones que enfrenta actualmente.
Cabe destacar que, en su conferencia mañanera de este miércoles 17 de marzo, AMLO dijo que se podría revocar la concesión a la minera canadiense que opera en Cosalá, si no acepta que el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros es el que tiene la titularidad del contrato colectivo.
Ante ello, el presidente advirtió que, de no respetar las leyes mexicanas, el gobierno federal podría proceder con la revocación de la concesión a la empresa, tras lo cual aseguró que “no va a faltar otra empresa que quiera".
Incluso, por los hechos señaló que el canciller Marcelo Ebrard podría interceder con el gobierno canadiense para que éste explique la situación, lo cual aclaró, no se trata de una amenaza o una advertencia, pero dijo que, si no se respeta la legalidad se podría revocar la concesión.