Probablemente alguna vez te ha pasado que se te juntan varios gastos y la quincena no te alcanza para pagar todas las deudas, por lo que piensas que pagar tu tarjeta de crédito es algo "no tan importante" que puede esperar.

Primero debemos partir del punto de que si sueles hacer esto, tu tarjeta corre el riesgo de terminar en un despacho de cobranza. 

Los despachos de cobranza tienen la labor de intermediar entre el estado financiero y el deudor, con el propósito de adquirir el pago de la deuda

¿Cómo evito que mi tarjeta termine en un despacho de cobranza?

Para evitar que tu tarjeta termine en algún despacho de cobranza primero debes conocer todas las consecuencias negativas de no pagar tu tarjeta de crédito.

Cuando no pagas tu tarjeta, tus deudas comienzan a generar intereses, los cuales incrementan aún más tu deuda de forma periódica. Lo malo es que al final, sea de la forma que sea, te verás obligado a pagar el total de tu deuda.

Pero la peor parte de no pagar tu tarjeta de crédito es que tu historial de buró de crédito queda manchado.

Lo que significa que si a futuro quieres solicitar algún crédito, el banco al que se lo solicites te identificará como deudor, lo que ocasionará que bajen las probabilidades de que obtengas dicho crédito.

Si no liquidas la deuda, esa mancha en tu historial se quedará ahí. Además dependiendo de la cantidad de la deuda, tu historial puede quedar manchado hasta por 6 años.

¿Cuál es el tiempo máximo para pagar tu tarjeta?

Lo ideal sería pagarla en tiempo y forma, pero si se te dificulta pagarla a tiempo, el tiempo máximo es de 120 días.

Ya transcurridos los 120 días, el banco tiene el derecho de vender tu deuda a un despacho de cobranza.

Y si esto llega a ocurrir, créeme que no te gustará.

Cuando el despacho de cobranza tiene tu deuda en su poder, tiene la posibilidad de estarte molestando todo el día, haciéndote llamadas insistentes, y en los casos más extremos, recurren a métodos poco éticos. Todo con tal de que pagues la deuda. 

Aún tienes esperanza de salvarte

Si estás a poco de que tu deuda se vaya a un despacho de cobranza, tienes la opción de acercarte con tu banco y negociar con tu deuda.

Jamás te vas a salvar de pagar la deuda, pero pueden ofrecerte facilidades de pago. Pero eso sí, ten en cuenta que tu historial crediticio seguirá manchado.