¿Ticketmaster infla los precios de los boletos? Un usuario de redes sociales denunció los mecanismos que usa la empresa para elevar los costos, por lo cual pidió que la Profeco intervenga.
De acuerdo con lo indicado por el usuario de Twitter, “@laloestralop”, Ticketmaster recurre a diferentes acciones por las cuales infla los precios de los boletos de conciertos y otros eventos.
Debido a los mecanismos con los que afirma, Ticketmaster eleva los costos de los boletos, el internauta pidió que intervenga la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Ticketmaster ha triplicado los precios de los boletos en 30 años
En medio de la polémica por los boletos para el Corona Capital que ofrecía en reventa Miroslava Valdovinos, el usuario de Twitter, “@laloestralop”, lanzó un cuestionamiento:
¿Cómo logran tener muchos boletos si es un pedo comprarlos en su pagina?
@laloestralop
Luego de ello, el internauta aseveró que desde hace tiempo, Ticketmaster encontró una forma para inflar precios de sus boletos, lo que ha obligado a los consumidores a pagar lo que sea.
Al iniciar la serie de publicaciones sobre el caso, el usuario de Twitter aseveró que el precio de los boletos de Ticketmaster, se ha triplicado en un lapso de 30 años.
Tras ejemplificar la magnitud del poder de la empresa sobre los conciertos, con un caso de la banda Pearl Jam, “@laloestralop” advirtió que Ticktemaster puede “cancelar a un artista” que no quiera trabajar con ellos.
¿Cómo es que Ticketmaster infla los precios de los boletos?
En su hilo de Twitter, el internauta mencionó el caso de los “Clubs de Beneficios” que establece Ticketmaster por medio de acuerdos con bancos, para la venta de boletos.
Al respecto, señaló que los acuerdos implican que la empresa en realidad use a los bancos como revendedores, pues vende entradas a las instituciones financieras para que éstas a su vez, las vendan a los fans.
Sobre lo anterior, se citó una investigación realizada por el departamento de justicia de New York, en la cual se concluyó la existencia de mecanismos para inflar los precios de los boletos.
El reporte de las autoridades estableció diferentes conclusiones, entre las cuales se destaca que la venta de boletos se trata de un “juego arreglado”.
La sentencia fue ejemplificada con un caso ocurrido en 2014, cuando un solo comprador adquirió pese a las restricciones, más de mil boletos para un concierto de la banda irlandesa U2.
Las autoridades de Nueva York determinaron que el caso, muestra un mecanismo que permite elevar los costos de las entradas de conciertos, hasta en un mil por ciento.
¿Y quiénes pueden comprar hasta miles de boletos para revenderlos?
Teniendo el antecedente de los acuerdos que Ticketmaster tiene con los bancos, se destaca la existencia de las reservas y preventas para los conciertos.
Los “beneficios” que los bancos otorgan a sus cuentahabientes para la adquisición de entradas, provoca que el número de boletos reservados para el público en general se reduzca.
La investigación encontró que la mayoría de los boletos de Ticketmaster, no son para el público en general, sino para intermediarios que tienen ventaja sobre los consumidores promedio.
Y es que de acuerdo con las autoridades de Nueva York, los intermediarios, acaparan la venta de boletos al gozar de información privilegiada y comúnmente, robots de venta.
Sobre el tema, el diario New York Times reportó que Ticketmaster estima que el 60% de los boletos para los conciertos más deseados, que se ponen a la venta, son compradas por bots.
Los mismo artistas compran boletos para revenderlos, advierte investigación
Por su parte, las autoridades de Nueva York lograron detectar que solo el 46% de los boletos que libera son para el público, pues el 54% restante se reserva.
De ese porcentaje, el 38% es para preventas y el 16% corresponde a los llamados “insiders”, que son los mismos artistas, agentes, salas, promotores, marketing, y patrocinadores.
Sobre el grupo de “insiders”, se ha detectado que los mismos artistas recurren a la compra de sus boletos para proseguir con la cadena de reventa.
El hecho se comprobó en 2017, cuando Live Nation, que es propiedad de Ticketmaster, reveló que ayudó a artistas a revender sus propios boletos para generar mas dinero.