Me atrevo, incluso, a vaticinar una paliza mayor a la del 2018 al PRIANrd en las urnas este año electoral 2024. Y es que no son pocos los motivos, una oposición que recibe órdenes de lo más podrido de la IP en México, vía la desagradable persona de un, de medianito para abajo, Claudio X. Gonzalez, que sólo sabe cosechar ridículos y FRACASOS; no mucho más se puede esperar.

Por lo que van los tres partidos

Los tres membretes de la oposición y su alianza antinatura, evocan a los líderes de la Revolución mexicana, enemigos algunos entre sí, que por conveniencia a la unidad nacional y al régimen reposan sepultados juntos, como a manera de castigo eterno a más de uno, pero obligados a ‘sonreír’ cada que las luces del monumento a la Revolución se prenden.

Estos partidos políticos, pues, ya a lo único que aspiran, luego de tantos traspiés, candidata con modales grotescos incluida, es a conservar sus registros como partidos políticos y así poder reagrupar fuerzas y estrategias. El haber quedado en evidencia en PRIANrd en lo respectivo a que AMLO no era “un peligro para México” y que NO “somos Venezuela y/o Korea del Norte”, sino incluso algo muy, pero MUY distinto, harán que muchos electores otrora anti lopezobradoristas, al adivinarse engañados por años, se la cobren en las urnas, así por mero orgullo nunca lo reconozcan, porque en la soledad de la mampara, dijera el clásico, el voto es sagradamente secreto. Todos los escándalos y cochinada que han salido a la luz, desde el día uno del sexenio hasta hoy, por parte de esos institutos políticos cuando fueron gobierno, no pueden sino tener graves consecuencias electorales, que ni la más atinada empresa encuestadora es capaz de predecir.

Por lo que pelearía Xóchitl Gálvez

Desde hace once años, Xóchitl tiene una hermana, de nombre Malinalli, en la cárcel por secuestro, siendo sorprendida en flagrancia cuidando a un infortunado plagado en una casa de seguridad. Desde que Xóchitl regresó a la política se rumoró que la principal razón era el intentar liberarla, por medio del tráfico de influencias, cosa que aún no logra, pero que bien puede haber sido la moneda de cambio, habida cuenta que buena parte del poder judicial es, no solo inmensamente corrupto, sino anti gobierno en este sexenio, para prestarse a ir como candidata a una contienda de antemano pérdida. Es el escenario que el que esto escribe, ve, y que se verá, pienso, llegando el día de la elección, ya que además, la doctora Claudia Sheinbaum es inmensamente superior ética, moral y popularmente, por no decir en preparación e inteligencia al resto de los todavía hoy aspirantes (suspirantes) a la silla presidencial al sexenio 2024 / 2030.