IRREVERENTE
Les platico: Desesperado como anda por estar en el fondo de las preferencias pre pre pre electoreras, el secretario de Gobernación no se cansa de regar el tepache.
Hace dos semanas se ufanó de que al inteligente sureño le va mejor que al jalador norteño y queriendo tupirle al gobernador Samuel García, se echó encima a los nuevoleoneses.
Ahora, en su gira de proselitismo por Sonora se aventó otra “perla” de su ignorancia e imprudencia al citar la soga en la casa del ahorcado, esto es, al ponernos como ejemplo al régimen chavista de Venezuela respecto a un tema cultural.
Con la venia del respetable público, voy a ahondar en dicho tema porque si no, capaz de que Adán Augusto López al rato sale con otra babosada de ese tamaño o aún más grande. ¡Arre!
1. Gustavo Dudamel -director de la Filarmónica de Los Angeles, salió chistando de su natal Venezuela cuando Hugo Chávez mostró sus afanes totalitarios después de haber engañado a millones de venezolanos que lo llevaron al poder como producto del voto del hartazgo hacia los regímenes anteriores. Lo mismo ocurrió aquí en el 2018, cuando los mexicanos quisieron demostrarle a priyistas y panistas que estaban hasta la madre de su podredumbre y sentaron en el palacio nacional a uno peor que ellos, “ya saben a quien”.
2. Adán Augusto quiso ilustrar con su “sabiduría” a los sonorenses al afirmar que Dudamel es producto de un proyecto musical de José Abreu, que “había sido profesor de música de Chávez”. La realidad es que el economista Abreu implementó dicho programa muchísimo tiempo antes de que Chávez llegara al poder. O sea, el director de orquesta de la Filarmónica de Los Angeles no llegó ahí como producto de los inexistentes logros culturales que Adán Augusto le adjudica a Hugo Chávez.
3. El secretario de Gobernación no sabe o se hace güey, que un programa de orquestas infantiles como el que diseñó Abreu en Venezuela, comenzó a aplicarse en México desde el primer año de gobierno de AMLO, de la mano del ex secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán. Se llamaba “Esperanza Azteca” y arrancó a mediados del 2009. Fue arruinado por las transas del hoy embajador de México en EEUU debido a que intentó desviar hacia Morena parte del presupuesto que le habían asignado para dicho proyecto.
4. Adán Augusto dijo en Sonora lo siguiente y cito textualmente sus palabras: “Chávez diseñó un esquema para llevar la música a todos los pueblos y crear orquestas infantiles y juveniles. Este ha sido el experimento cultural más exitoso de los últimos 40 años en el mundo”. Eso es tan falso como las posibilidades de que el secretario de Gobernación llegue a la presidencia de México.
5. Cito otra expresión de Adán Augusto en la misma ocasión: “En 2007, Hugo Chávez anunció la creación de la ´Misión Música´ en honor al sistema nacional de orquestas infantiles y juveniles de Venezuela (Fesnojiv) fundado por José Abreu”. Eso es totalmente falso. Abreu implementó su programa cultural cuando Chávez era apenas un aprendiz del oficio musical, en el que no descolló porque siendo zurdo, se le dificultaba diamadre ejecutar partituras musicales escritas por diestros para diestros. Era bueno pa´l beisbol, deporte en el que los zurdos tenemos ventaja sobre los diestros, dicho sea de paso.
6. El secretario de Gobernación insistió en la necesidad de que México cuente con un programa como el aplicado por el régimen bolivariano. Otra mentira o bien otra muestra de la ignorancia del notario público número 26 de Villahermosa venido a más en su puesto actual. Cuando Abreu aplicó su programa de orquestas infantiles y juveniles, Venezuela no acuñaba aún el término ese de “bolivariano”, que vino a ser el estandarte del actual régimen que heredó Chávez a su chofer y guarura Nicolás Maduro.
7. Una más, la última desbarrada de Adán Augusto al respecto: “Dudamel es el fruto de un proyecto de formación cultural en un país donde fueron a buscar a los niños, a los jóvenes y a educarlos y fueron creando pueblo con pueblo para armar orquestas sinfónicas”. Abreu se murió renegando del gobierno totalitario de Chávez. Entonces, el secretario de Gobernación ofende la memoria de dicho economista, al ligarlo a un proyecto cultural que hubiera tronado como sapo, porque es bastante p3nd3jo ofrecerle orquestas infantiles y juveniles a un pueblo que anda buscando comida en los basureros, y esto lo he visto con mis propios ojos, en las tres veces que he ido a Venezuela desde el año 2019.
Para información de Adán Augusto, van estas analogías:
El gobierno de López Obrador está copiando al de Chávez en los siguientes aspectos y esto sí podría decirlo el señor secretario, digo, si es que lo sabe y si es que tiene los pantalones para admitirlo:
1. Cuando Fidel Castro tomó el poder en Cuba, los empresarios no creyeron que los gringos permitirían que el comunismo les arrebatara sus negocios en la isla. Muchos de esos empresarios anduvieron de elevadoristas varios años en Miami.
2. Al ganar Chávez las elecciones, los venezolanos no creyeron que a ellos les sucedería lo que a los cubanos porque nadaban en petróleo y miren lo que ocurrió. Muchos mexicanos todavía creen que no ocurrirá lo mismo en el “cuerno de la abundancia”.
3. Chávez nombró como jefe de su campaña electoral a un apellido de pedigrí: Camilo Marín, quien era coordinador nacional del Frente Nacional de Empresarios y Productores. Le sirvió como enlace con la IP venezolana. ¿A quiénes nombró AMLO como coordinadora de su campaña y como jefe de la oficina de su presidencia? ¿Acaso no fueron dos apellidos de pedigrí como Tatiana Clouthier y Poncho Romo Garza? ¿Cómo le fue a Marín? Hoy vive su vejez arropado por el seguro de desempleo en Miami. ¿Cómo les fue a Poncho y a Tatiana?
4. Los gobiernos de Carlos Andrés Pérez y el de su sucesor Rafael Caldera, del partido oficialista, deslizaron a Venezuela en un tobogán que sirvió como caldo de cultivo para la aparición de Chávez en las boletas electorales, como una alternativa anti-sistema, que llenó de esperanza a los venezolanos. Más que votar por López Obrador, 30 millones de mexicanos lo hicieron hartos de las corruptelas de Peña Nieto, Caderón, Fox, Salinas de Gortari y otras lacras del PRI y el PAN.
5. Ocho meses antes de las elecciones que lo llevaron al poder, Chávez placeó a quienes integrarían su gabinete. Presentó ante los venezolanos a prestigiados nombres que ocuparían los ministerios de relaciones exteriores, economía, hacienda, salud, turismo, educación y la procuración de justicia. Andrés Manuel hizo lo mismo en plena campaña, cuando placeó a Vasconcelos para la SRE, a Urzúa para Hacienda y a otros notables en carteras estratégicas. ¿Qué pasó en Relaciones Exteriores? Mandó al Senado al acreditadísimo Vasconcelos y puso al quemadísimo e inepto Marcelo Ebrard, a quien rescató de su exilio en Francia, donde se refugió en casa de su hermano tras el desastre de la Línea 12 del Metro.
6. Chávez escondió a los más influyentes de su equipo: Rafael Ramírez, Diosdado Cabello, Adán Chávez y Elías Jaua. Solo Nicolás Maduro se colaba en las pasarelas de campaña, y eso porque era su chalán. López Obrador no mostró durante su campaña a Ebrard, a Fernández Noroña, a Napito Gómez Urrutia, a Rocío Nahle, a Paco Ignacio Taibo II, a Bejarano, a Martí Batres, a Dolores Padierna, a Sheinbaum, a Adán Augusto, ni a otros de esas tribus.
7. Chávez fundó su propio partido político. AMLO creó a Morena en el 2011.
La única diferencia…
… Es que Chávez y Maduro han hecho sus movimientos hacia el totalitarismo y el desequilibrio de poderes en 20 años… y López Obrador lleva lo mismo en solo 4 años…
CAJÓN DE SASTRE
“¿Algún comentario, don Adán Augusto?”, remata la irreverente de mi Gaby.