He leído durante algunos días las columnas publicadas que hablan de una supuesta rivalidad entre las dos compañías aéreas encabezadas respectivamente por Andrés Conesa y Enrique Beltranena.
Apenas el fin de semana pasado se inauguró la edición 47 del Tianguis Turístico CDMX, y el Secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués ha manifestado su felicidad por considerar que está siendo todo un éxito.
Y dentro de este Tianguis, por supuesto, uno de los temas que se han abordado ha sido el de la aviación comercial. Ahí Aeroméxico mencionó el regreso de su vuelo a Roma, pero no solo el Caballero Águila ha dado estos días importantes anuncios de nuevas rutas, sino también el resto de las aerolíneas nacionales.
Algunas de las rutas que se pretende incrementar son con destino al Caribe, a Centro y Sudamérica, pero parece ser que Aeroméxico es quien tiene preparadas más sorpresas con nuevas rutas a Europa.
La rivalidad que mencionan otros medios de comunicación tiene su origen en el más reciente informe que dio el Secretario de Turismo Miguel Torruco, respecto a los números arrojados el año pasado.
Volaris transportó a más de 23 millones de pasajeros, con lo que obtuvo un incremento del 28% con respecto al año anterior (2021), mientras que la segunda aerolínea que le sigue los pasos a la empresa que conduce Beltranena, sorpresivamente no fue Aeroméxico, sino VivaAerobus; ellos transportaron durante todo el año pasado a más de 17 millones de pasajeros, su crecimiento fue del 38.1%.
En efecto, VivaAerobús es la aerolínea nacional que más creció respecto al año anterior, y que muchas veces ha sido la más vilipendiada dentro de la industria aeronáutica, al extremo de llamarle con sorna y desprecio “viva el microbús”. Ahí la tienen, sin hacer aspavientos y calladita, la compañía aérea de Juan Carlos Zuazua tiene números muy interesantes y exitosos.
Por su bajo perfil, muchos medios ni siquiera los consideran, y están colocando sobre el ring solo a dos aerolíneas: Volaris y Aeroméxico. Ahora, ¿cuántos pasajeros transportó el año pasado la aerolínea bandera? Más de 10 millones de pasajeros, entre la troncal y su alimentadora, Aeroméxico Connect.
A diferencia de las dos aerolíneas de bajo costo, Aeroméxico no tuvo un incremento respecto al año anterior, sino un decremento del 3.1%. Todas estas cifras son proporcionadas -y pueden consultadas en su página web- tanto por la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), como en la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT).
Para este año Aeroméxico tiene una proyección conservadora en cuanto al número de pasajeros, pues de los más de 81 millones de pasajeros que se pretenden transportar en toda la aviación en nuestro país, ellos están dispuestos a ofrecer más de 22 millones de asientos, es decir, apenas un poco más del 25% del total. Mientras que Volaris tiene una proyección de más de 32 millones de asientos para todo el 2023; y detrás nuevamente le sigue VivaAerobus con más de 25 millones de asientos.
Sabemos que Aeroméxico opera algunas de las rutas que eran de Mexicana de Aviación, y que después de la salida de Interjet del mercado, también se interesa por algunas de sus rutas que quedaron “al garete”. Sin embargo, la degradación a Categoría 2 ha afectado más al Caballero Águila que a las bajo costeras.
Volaris ha visto la oportunidad de expandirse más hacia Centroamérica y también dentro del país, pues tener bases en Tijuana, Guadalajara y Cuidad de México, le ha permitido una mayor movilidad.
Aeroméxico le apuesta a los vuelos transoceánicos. Acaba de reabrir su ruta a Japón después de haber sido cerrada por la pandemia del Covid-19; no se ha manifestado sobre recuperar la ruta a China. Mientras, siguen con el vuelo a Corea del Sur y los vuelos a Europa, entre cuyos destinos encontramos a Roma, Londres, Ámsterdam, Paris y Madrid. Tampoco hemos escuchado si van a operar de nuevo el vuelo a Barcelona; todavía me acuerdo del pleito casado que tenían con Emirates por esa ruta.
En los hechos, aunque algunos busquen implementar una narrativa de rivalidad, en mi opinión creo que eso es totalmente equivocado, pues de entrada hay que dejar claro que son dos modelos completamente diferentes de negocios.
Aeroméxico es una aerolínea troncal hecha y derecha, que además cuenta con su aerolínea alimentadora: Aeroméxico Connect, que en los hechos -por el tamaño de sus aeronaves- son los que principalmente están utilizando las rutas que dejó Aeromar, ante su reciente quiebra.
Difícilmente Volaris podría competirle en ese rubro, básicamente por el tipo de aviones que maneja: los A320, A320NEO, A321, A321NEO que son demasiado “grandes” para los aeropuertos a los que llegaba Aeromar. Además, tampoco puede obviar el tipo de rutas que utilizan; y es que ahora sí Aeroméxico es la aerolínea más antigua del país, y eso le da preferencia con el tema de los slots, pues los mejores los tienen ellos, y no Volaris. No solo son los vuelos a Asia o a Europa, Volaris no tiene en su radar lugares como Chile, Argentina o Brasil, a los que sí llega Aeroméxico.
Considero que no solo podemos basarnos en el número de pasajeros que mueven ambas aerolíneas para fincarles una rivalidad. Yo no la veo por ningún lado. Tanto por ser modelos de negocio completamente diferentes como la diversidad de rutas que me propone una sobre la otra, y ni hablar del servicio a bordo, por lo menos en Aeroméxico se sigue guardando la compostura de lo que debe ser un tripulante a bordo, totalmente alejado a fungir como payaso de circo.
Y lo digo con total respeto a mis compañeros de Volaris, que día a día son obligados a “entretener” al pasaje, porque resulta más barato que poner un sistema de entretenimiento a bordo de sus aeronaves.
No podemos olvidar que Aeroméxico pasó por un proceso muy grande restructuración (el famoso “Chapter 11″ o Capítulo once), y todavía falta que termine por asentarse, pero esto podría tardarse más si no se resuelve pronto el regreso de muestra aviación a la Categoría 1.
Solo para redondear la idea, la amenaza de legislar permitiendo el Cabotaje, traería pérdidas para Aeroméxico, y no a Volaris. Habría que ver y analizar qué tanto le conviene a Delta Airlines, como socio de Aeroméxico, aumentar su presencia en el país; pero ellos acaban de aumentarles a los pilotos el salario en un 34%.
En resumen: Volaris no es rival en lo absoluto de Aeroméxico, y quien lo vea así es que no ha entendido la complejidad de la industria aeronáutica del país. Estos dos tiburones empresariales saben muy bien que “más vale tener un enemigo conocido, que un amigo a la fuerza”, como dijo Napoleón Bonaparte.