Finalmente llegó el día de la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo Puerto “Tulum”. Sí, no estuvo exento de algunos detalles y gazapos, digamos que eso es lo de menos; hablemos de lo que realmente importa.

No lo puedo evitar, tuve una gran escuela en Mexicana de Aviación; gracias a ella supe que muchos de los aeropuertos de este país se construyeron gracias a esta aerolínea. Voy a compartirles más información al respecto.

Mexicana de Aviación ve la luz en 1921. Comenzó primero como aerolínea de carga y después fue mutando hasta convertirse en una línea aérea de traslado de pasajeros.

Su primera ruta fue a Tampico, haciendo una escala en Tuxpan; el 15 de abril de 1928, estaban aterrizando literalmente en “descampados”; fue hasta el año de 1929, en el mes de agosto, que Mexicana de Aviación inauguró el nuevo aeropuerto que tuvo que construir, con dos pistas.

Ya desde el año 1928 el destacado ingeniero y aviador mexicano Guillermo Villasana había expresado que además de aumentar la flota de aviones, lo que nuestro país requería era un sistema aeroportuario, y que ese sería el futuro de la industria aérea.

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La aviación en nuestro país comenzó a regularse el 1° de junio de 1928 con la creación de la Dirección de Aviación Civil (DAC), dependiente de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas. Y en aquel entonces los responsables de construir las terminales aeroportuarias eran las líneas aéreas, por instrucciones precisas de la entonces DAC.

Esta es la razón por la que siempre aseguro que la gran mayoría de los aeropuertos que hoy gozamos, los construyó Mexicana de Aviación. Fue hasta el año de 1947 cuando el Gobierno comenzó a hacerse cargo tanto de la construcción como de la de la remodelación de los aeropuertos ya existentes.

Para el año 1962 México contaba con 50 aeropuertos operando por todo el país, los cuales se dividían de la siguiente manera: uno operado totalmente por PEMEX, una base militar con operaciones comerciales, 23 aeropuertos estatales, 22 federales y tres concesionados a las líneas aéreas.

En 1965 se creó Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), y desde entonces hasta el 2002, los aeropuertos fueron administrados por este organismo. Posteriormente, en los años 80 ya no se construyeron aeropuertos porque dejaron de ser una prioridad para los gobiernos de aquel entonces.

Hoy tenemos 79 aeropuertos, incluyendo el recién estrenado Felipe Carrillo Puerto, y de ellos 65 son internacionales. En el presente sexenio, les guste o no, se han construido 2 aeropuertos; estamos hablando de que tuvieron que pasar décadas, ¡casi 40 años!, para que se volviera a ver al sistema aeroportuario como prioritario para el país.

Por supuesto, la prensa ha cubierto este hecho desde distintos ángulos, algunos como Forbes cabeceando con “Aeropuerto de Tulum abre inconcluso y con goteras”, o el diario español El País “López Obrador inaugura el aeropuerto militar de Tulum” o Milenio “El aeropuerto de Tulum, hazaña de la ingeniería”, y así se pueden encontrar varios titulares.

Yo en lo que me quiero centrar es en la importancia de ampliar el sistema aeroportuario actual, y que ustedes mis estimados lectores, conozcan la historia de cómo fue que se construyeron los aeropuertos en este país.

Entre los puntos a favor de la nueva terminal aérea, está el lograr que el aeropuerto de Cancún ya no este tan saturado, al igual que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México; la terminal aérea quintanarroense sufre cada año una importante saturación a pesar de que a lo largo de los años, ha ido creciendo conforme a la demanda que tiene.

Cuando yo entré a volar en Mexicana solamente había una terminal; después abrieron la internacional, que se distinguía de la nacional por ser una palapa. Después Alaska y American hicieron una ampliación más para sus pasajeros, y actualmente cuenta con cuatro terminales.

Ahora, en el aeropuerto de Tulum, el primer vuelo en aterrizar ya de manera formal fue un A320neo de la aerolínea de bajo costo VivaAerobus; anteriormente y como vuelo de prueba Aeroméxico Connect había aterrizado días antes de la magna inauguración.

Se espera que aerolíneas nacionales como Aeroméxico Connect y VivaAerobus, así como Delta, United y la bajo costera Spirit ofrezcan entre todas cerca de 126 vuelos a la semana.

Viene la temporada alta de invierno, y el Caribe mexicano es una excelente opción para vacacionar. También se tiene pensado que esta terminal aérea conecte con el Tren Maya, que está próximo a inaugurarse. Ahora, quiero ser muy clara: esta infraestructura es para el beneficio de todo el país.

Sin importar tu ideología, tu afinidad con tal o cual partido político, incluso con tus gustos musicales, todo eso es totalmente intranscendente, lo que importa es que son obras públicas que hace mucho tiempo se dejaron de hacer, siguiendo las recetas del neoliberalismo donde era imperante adelgazar las obligaciones del Estado, y privatizar todo.

Hoy el Aeropuerto de Tulum es una realidad, en este sexenio y después de más de 40 años, se vuelven a construir aeropuertos y a darle a la aviación el lugar que se merece; eso sí, soy consciente que falta todavía mucho camino por andar, pero vamos bien.

A nosotros como gobernados nos corresponde exigir muchas cosas: que se usen y mantengan estas obras, que sean transparentes en sus finanzas y sobre todo, tener la paciencia para que se vuelvan autosustentables. Es imposible que consigan el éxito total en las próximas 48 horas (es un decir).