La propuesta del senador Alejandro Rojas, de convertir a los presidentes en senadores al término de su mandato se debe analizar con detenimiento.
La iniciativa tiene cosas muy rescatables como las relativas a la continuidad, el asesoramiento y la estabilidad política y económica del país.
Aunque de primera instancia puede parecer que el hecho de que implique que el presidente saliente obtendría fuero constitucional y esto impediría que, en su caso fuera llamado a rendir cuentas por algún motivo, siempre existen instrumentos que contempla la Constitución para retirar el fuero en caso de que se comprobara alguna acusación en su contra.
No sería abrir paso a la impunidad, por el contrario, estarían más a la mano para rendir cuentas.
¿De qué trata?
El senador suplente de Ricardo Monreal, Alejandro Rojas Díaz Durán un camachista y marcelista de hueso colorado, que fue fundador del partido Centro Democrático, asesor político en el gobierno de la CDMX, cuando Andrés Manuel López Obrador ocupó el cargo y que coordinó lacampaña de Marcelo Ebrard para dicha jefatura, lanzó una iniciativa de reforma al Artículo 56 de la Constitución pretende que los expresidentes de México que concluyan su mandato puedan ser senadores por un periodo de seis años, sin necesidad de ser electos en las urnas, sin gozar de la dieta correspondiente, pero sí del fuero constitucional.
En caso de ser aprobada por la actual legislatura, cosa que por los tiempos legislativos no alcanzaría, la reforma no se aplicaría a los recientes expresidentes y queda duda si solo sería a Andrés.
Sucede en otros países
El senador asegura que esta iniciativa “busca enriquecer nuestro sistema legislativo con perspectivas y visiones” y apela a expresiones que se han dado en otros países como en Chile, Uruguay y en Europa, donde los expresidentes pueden seguir participando en la política con su experiencia.
Esta iniciativa contiene elementos rescatables en cuanto a continuidad, asesoramiento, rendición de cuentas y estabilidad, pero no en el contexto que vive México.
Los casos que el mismo senador Rojas menciona, como Chile o Uruguay, se dieron después de la dictadura militar, donde el costo de pasar a una democracia fue muy alto y que fue por la vía de la representación popular que se logró construir instituciones y fortalecer el andamiaje democrático, sin que ningún partido tuviera la mayoría absoluta como lo pretende Morena.
Visto de otra forma, México va en sentido contrario a las expresiones que citó el senador, México está entrando a una autocracia con un partido hegemónico y militares dicho lo cual, lo que propone iniciativa probablemente traería efectos contrarios a la democracia.
¿Qué hay detrás?
En el terreno meramente político, tenemos un presidente popular, capaz de influir en el animo del electorado y aunque la Ley actual le prohíbe al presidente hacer proselitismo, AMLO se la pasa por el arco del triunfo.
La candidata que AMLO impuso en Morena se ha visto presionada por la gran popularidad de la candidata del Frente Opositor, Xóchitl Gálvez y por la fuerte alianza que ha construido con la sociedad, que en términos reales, pone en riesgo la posibilidad de que gane la elección presidencial.
La segunda, es que, así como se está configurando el Frente Opositor para contender por las nuevegubernaturas y el Congreso de la Unión que se disputarán en 2024, es factible que Morena no logre obtener la mayoría simple, con lo cual,se dificulta el plan de AMLO de ganar la mayoría absoluta en el Congreso y antes de irse hacer importantes reformas constitucionales.
Por ello, una fórmula para que el plan de AMLO pueda avanzar es con el fastrack que le regalaría Alejandro Rojas Durán, para “cogobernar” desde el Senado.
Lo que causa controversia en la iniciativa es el de la impunidad, principalmente porque AMLO ha tratado de cerrar cualquier tema que tenga que ver con la rendición de cuentas aunque en el supuesto de llegar al Senado pues que mejor que tenerlo ahí sentado para que dé explicaciones y no impune en el extranjero y mañas cuando en el tema de la corrupción hay expedientes de las asignaciones directas, el despilfarro en la construcción de sus megaobras y muchos más.
Otra motivación, está en el tema del crimen organizado. La relación con la mayoría de los gobernadores de extracción Morenista y aliados, documentados en la prensa y algunos que inclusive ya fueron detenidos. El mismo presidente que se reunió con la familia del mayor capo y que ha defendido públicamente a estos criminales en sus mañaneras.
La propuesta de Díaz Durán podría ir mucho más al tema de mantener en el poder a AMLO por una de las tres razones anteriores o por las tres y no por una visión democrática.
¿Será que Claudia no levanta y Andrés busca refugio o estamos ente una propuesta que permita estabilidad, responsabilidad, rendición de cuentas y paz en el país?