Carlos Loret de Mola, en coordinación con Mexicanos contra la Corrupción y la Inmunidad, realizó una investigación sobre la casa donde vive uno de los hijos del presidente AMLO en Houston, Texas. El reportaje busca poner en evidencia de que López Beltrán vive lujosamente en el extranjero, lo que enviaría -así estiman- una contradicción sobre el mensaje de austeridad que envía el presidente todos los días desde Palacio Nacional. Adicionalmente, el trabajo de Loret y de la organización civil levantaría cuestionamientos de corrupción.

Luego Loret publicó un vídeo en Latinus cuestionando de qué ha vivido el presidente de México desde que dejó el cargo de jefe de gobierno del Distrito Federal hasta asumir la presidencia del país.

Según ha trascendido López Beltrán sí vive en una residencia en los suburbios de Houston. Sin embargo, la casa pertenece a su esposa, y es ella quien ha sido responsable del pago de la hipoteca de le propiedad.

La prensa opositora busca incansablemente lastimar la popularidad de AMLO mediante un constante golpeteo político que pretende socavar a la vez la credibilidad del presidente. Sin embargo, todo parece indicar que AMLO es un político indestructible. Un reportaje podrá quizá sembrar dudas en torno a la coherencia de sus mensajes y la forma de vida de sus hijos, o mismo sobre la honestidad del propio presidente, pero una aclaración de los hechos (fundada o infundada) por parte de AMLO en una mañanera será más que suficiente para disipar ante su base electoral cualquier duda sobre su integridad personal o de miembros de su familia.

En suma, el reportaje de Loret poco o nada contribuirá al descenso de los índices de popularidad de AMLO. El presidente de México es un fenómeno político jamás visto antes en la historia reciente de México. Su extraordinario genio comunicativo, sumado a un carisma que le permite conectar espléndidamente con la mayoría de los mexicanos, le hace inmune a cualquier ataque proveniente de la oposición o de la prensa.

Las columnas más leídas de hoy

¿Es bueno para la democracia mexicana que la palabra del presidente sea más poderosa que la voz de la prensa? No. Por el contrario, la presencia de un hombre todo poderoso como presidente de México representa un serio riesgo para la viabilidad democrática y para el porvenir de las instituciones.

En suma, AMLO es un político indestructible que ha sido capaz de sortear, en términos de su popularidad, graves errores y fracasos en materia económica, de seguridad o del manejo de la pandemia. Goza de una inmunidad política que deja a la oposición sin opciones. Para batirle, deberán buscar otras formas.

José Miguel Calderón en Twitter: @JosMiguelCalde4