Partamos de una definición. La bibliomancia, apunta el Diccionario de la lengua española, es la “adivinación que consiste en abrir un libro por una página al azar e interpretar lo que allí se dice”.
En el siglo II d.C. empezó a usarse en Europa una forma especial de bibliomancia conocida como sortes vergilianae. Consistía en buscar al azar frases del poeta romano Virgilio e interpretarlas.
La bibliomancia es incluso más antigua. Para conocer el día de su ejecución Sócrates recurrió a las sortes homericae —adivinar con textos de Homero—.
Para conocer el futuro parece más sensato leer libros que cartas, hojas de té o posos de café, ¿no lo crees así, querida presidenta Sheinbaum?
Te cuento, presidenta, que tengo una relación que voy a calificar de emocional con tu libro Claudia Sheinbaum: Presidenta. Sé que lo escribió Arturo Cano, pero como se ocupa de tu biografía, entonces afirmo que es tu obra y ya está.
¿Cómo gobernarás México a partir de hoy, 1 de octubre de 2024, y hasta el último día de septiembre de 2030? Abrí al azar el citado libro y encontré que Luis Linares Zapata le dijo a Arturo: “Claudia es una extraordinaria organizadora”.
Capacidad de organización es la principal virtud para triunfar en un cargo ejecutivo. Así que te irá muy bien, presidenta.
Por no dejar, busqué alguna frase del poeta profeta Virgilio. No tengo aquí ninguna de sus obras en papel, así que fui a Google y escribí “frases Virgilio”. La primera que apareció por ahí fue: Audaces fortuna iuvat (la fortuna favorece a la gente audaz).
Sé que te vas a atrever a hacer lo que tengas que hacer por el bien de México. Ello al margen de lo fuertes que puedan ser tus compromisos personales o políticos porque, ni hablar, una presidenta se debe solo al pueblo que gobierna.
Felicidades, Claudia, bien merecida la banda presidencial que hoy recibirás.
P.D. Eso de que Sócrates leyó a Homero para conocer el día de su ejecución no sé si sea cierto. Lo leí en una página de Wikipedia publicada en otro idioma que traduje gracias a Google.