Excelente. Tal palabra la he usado para calificar casi todas las columnas de mi querido y admirado amigo Ciro Gómez Leyva publicadas en Excélsior. El casi es la primera de ellas... otro casi es la de hoy.
Recuerdo que la primera de las colaboraciones de Ciro en el diario propiedad de Olegario Vázquez Aldir, la del 28 de octubre de 2024, tuvo este encabezado: “Un mes en su escondite”.
Empezó el señor Gómez Leyva su nueva etapa periodística con su conocida idea fija: AMLO es el peor de los gobernantes de la historia. Más del 70% de la sociedad mexicana, incluida la actual mandataria, Claudia Sheinbaum, piensa de Andrés Manuel que fue un gran presidente. A Ciro eso no le importa: él tiene otros datos.
Por eso Gómez Leyva, aquel 28 de octubre, arrancó su nueva temporada en los medios burlándose de AMLO: está escondido en su finca de Palanque, Chiapas. El expresidente López Obrador, dijo el columnista, no aparece en público para evitar que la gente le grite “viejo mentiroso, viejo cabrón”.
Hoy domingo volvió Ciro a su manía de provocar a AMLO, pero esta vez con la evidente intención de enfrentarlo a Claudia Sheinbaum por la vía de utilizar uno de los éxitos del secretario de Seguridad del actual sexenio, Omar García Harfuch.
“Dos meses en su escondite”. Esta es la columna del primero de diciembre de mi amigo Gómez Leyva, quien por lo visto contabilizará mes a mes el tiempo que AMLO haga lo que prometió: no intervenir ni para bien ni para mal en el gobierno de su sucesora, la presidenta Sheinbaum.
Seguramente en 2025 Ciro repetirá la expresión que evidentemente le obsesiona y sumará otros 30 días: “Tres meses en su escondite”.
Ciro se burla este domingo de Andrés Manuel: “Dos meses, ninguna declaración, cero fotos, ni un post”. Y dice que ahora se hace lo que el expresidente no hizo: combatir al narco. Cito al periodista: “El Operativo Enjambre, diseñado por Omar García Harfuch, es también un primer testimonio de lo que no se quiso hacer en el sexenio”. Según Gómez Leyva, en el periodo de López Obrador todo era para la delincuencia, “Dinero, hombres, mujeres, en esos tiempos en que Palacio Nacional cantaba que el pueblo estaba feliz”.
En lo personal pienso que Harfuch no habría sido tan eficaz en el inicio de su periodo como titular de Seguridad sin las reformas de AMLO, sobre todo la que hizo posible la Guardia Nacional. Por lo demás, si lo que quería era elogiar a Omar García Harfuch por su trabajo, Ciro Gómez Leyva pudo haberlo hecho como en su columna del pasado 23 de noviembre: mencionado solo los logros del secretario de Seguridad, esto es, sin meter en su alegato a López Obrador.
El 23 de noviembre de 2024 Ciro quería aplaudir a Omar y lo hizo. Ovación periodística merecida se llevó el policía de Claudia. Hoy, primero de diciembre, el columnista de Excélsior utilizó a Harfuch para otra cosa: sembrar discordia en la relación política entre el expresidente AMLO y la presidenta Sheinbaum.
Le urge a Ciro —no es el único— que AMLO reaparezca para exigirle a Claudia que rompa relaciones con el tabasqueño. Para Gómez Leyva el secretario Harfuch ha sido solo un pretexto y hasta una coartada elegante para caer en una transgresión psicológica-periodística: alimentar la obsesión del columnista contra un hombre como Andrés Manuel, en mi opinión histórico.
Veremos qué nueva coartada encuentra Ciro en el arranque de 2025 cuando contabilice el tercer mes de AMLO sin dar declaraciones…
¿Y si Andrés Manuel dijera cualquier cosa? Gómez Leyva y otros estarían felices porque se lanzarían a cuestionar a la presidenta Sheinbaum por no mandarlo al exilio con la esperanza de que, en una de esas, Claudia perdiera la razón —la principal de sus virtudes— y olvidara su innegable calidad humana para pelear con un hombre al que admira y agradece no solo por el trato personal amistoso durante tantos años, sino por haber dado los primeros pasos para cambiar a México en la lógica política que a ella la ha guiado toda su vida.