“Lo que sea de cada quien”. Eso decía ayer la columna Templo Mayor del diario Reforma. Elogiaba a la jefa de gobierno de la Ciudad de México por la forma en que las autoridades de la capital del país actuaron en el caso del feminicidio de Ariadna Fernanda.
La columna institucional de Reforma reconocía no solo a Claudia Sheinbaum, sino también al secretario de Seguridad y a la fiscal de la CDMX, Omar García Harfuch y Ernestina Godoy, respectivamente.
Es nota que reaccione de esa manera un periódico tan decidido a destruir todo lo realizado por el presidente AMLO y la gente más relevante de la 4T. Extraño, pero positivo reconocimiento de una parte de la prensa especializada en odiar al presidente de México y a quienes le apoyan. Ahí queda eso.
Lo que sigue es que sea destituido el fiscal del estado de Morelos, quien claramente actuó como cómplice en el feminicidio; si esto es posible, la justicia en nuestro país habrá dado un paso muy firme hacia adelante.
Por lo demás, es esperable que el gobierno de la CDMX entregue también resultados convincentes relacionados con la muerte de un niño en el Colegio Williams, el otro caso que en estos días ha golpeado fuertemente a la opinión pública.
El distrito 34 de Texas
“El congreso de Estados Unidos está en equilibrio”, dice el Washington Post. Agrega: el partido Demócrata “desafía la expectativas”. Y es que, como se lee en ese diario, el partido Republicano, apoyado por Donald Trump, se quedó corto en varios lugares.
Uno de los distritos clave, al menos para México, era el 34 de Texas. La élite republicana dejó caer toda su fuerza —inclusive con el decidido apoyo del hombre más rico del mundo, Elon Musk— para que Mayra Flores, la mujer nacida en México que odia a su país de origen, derrotara a Vicente González, demócrata estadounidense con raíces mexicanas que sí quiere a nuestra nación.
A pesar de los pronósticos en su contra, González venció con más de 8 puntos de ventaja a Flores. Gracias a políticos esforzados como Vicente González no está claro el control del congreso estadounidense, y qué bueno. La extrema derecha no arrasó y eso es lo importante.
Hubo muchos resultados electorales en Estados Unidos que generan esperanza. Uno de ellos, el triunfo de Maura Healey en Massachusetts. Será la primera gobernadora abiertamente lesbiana; ojalá crezca en el cargo y pronto aspire a la presidencia de ese país.