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La comisionada presidente de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), Andrea Marván Saltiel, dijo hace unos días que el organismo antimonopolio a su cargo revisará con lupa la venta por parte de la empresa española Iberdrola de 12 plantas de generación de electricidad y una eólica al gobierno federal, además de investigar las condiciones en el mercado de la línea aérea del Estado, Mexicana de Aviación.
El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló en su conferencia de prensa de las mañanas de este jueves 18 de enero que su administración también revisaría con lupa al órgano antimonopolio y que se enviará una reforma administrativa para que desaparezcan todos los organismos autónomos, con lo cual se tendría un gran ahorro presupuestario.
El mandatario también cuestionó la utilidad de la Cofece, ya que está institución nunca ha revisado los mercados del cemento, servicios financieros y de otros productos donde existen prácticas monopólicas de empresas privadas que afectan a los consumidores.
La transacción que quiere revisar con “lupa” la institución antimonopolios es la que se realizó el pasado mes de abril cuando el gobierno de la Cuarta Transformación llegó a un acuerdo con Iberdrola para comprar a la empresa española 13 plantas de generación de energía eléctrica con lo que se puso fin a una disputa de varios años entre la administración federal mexicana y la compañía hispana.
El corporativo español llegó a un acuerdo para vender un total de 8,534 megavatios (MW) en México al mayor administrador de fondos del país, México Infrastructure Partners (MIP), por cerca de 6 mil millones de dólares, sin embargo el secretario de Hacienda y Crédito Público Rogelio Ramírez de la O dijo que la infraestructura energética se adquirió por medio de recursos del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) y estas generadoras de energía eléctrica pasarían a formar parte de la infraestructura de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Según datos de Iberdrola, los activos que formaron parte de la transacción son los ciclos combinados de gas Monterrey I y II, Altamira III y IV, Altamira V, Escobedo, La Laguna, Tamazunchale I, Baja California y Topolobampo II y III, junto con el parque eólico terrestre La Venta III, que operan todos ellos bajo el régimen de Productores Independientes de Energía y Sociedades de Autoabasto; además de las plantas de ciclos combinados de gas privados Monterrey III y IV, Tamazunchale II y Enertek.
Ramírez de la O explico que; “No va a haber agregada la deuda pública presupuestal de México porque el Fonadin está fuera del balance público y porque es un vehículo capaz de salir al mercado para refinanciar esta transacción. En la Secretaría de Hacienda vamos a estar vigilando todo este proceso en los próximos 5 meses, la transacción va a ser completada y llevada a un aterrizaje en donde a partir de ese momento seguramente la Comisión Federal de Electricidad será la operadora”.
Las centrales eléctricas representan casi 80% de los activos de generación de Iberdrola en México y 55% de su flujo EBITDA en el país.
Con la adquisición de las 13 plantas del corporativo la CFE pasará de generar un 39.6% a un 55% de toda la energía eléctrica del país, con lo que la empresa productiva del Estado recupera la rectoría sobre ese energético.
Habría que recordar que la producción de energía eléctrica en función de las autorizaciones a las empresas privadas a través de las diversas figuras que se consolidaron con la reforma energética de 2013, superaba el 60% del total. En especial las empresas multinacionales de origen español Iberdrola y Naturgy con poco más de 20% de la generación de electricidad en el país.
Iberdrola era una empresa preponderante en el mercado eléctrico mexicano, sin embargo, al organismo autónomo encargado de frenar a los monopolios no le preocupó la concentración del mercado eléctrico y es hasta ahora que se recupera la rectoría del Estado mexicano en la generación de electricidad que el organismo antimonopolio le preocupa la concentración del mercado.
Naturgy es la principal empresa privada en el sector de energía en México, la única que integra los negocios de distribución de gas natural y generación eléctrica. Está presente en 16 estados: Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Hidalgo, Estado de México, Ciudad de México, Aguascalientes, San Luis Potosí, Guanajuato, Jalisco, Zacatecas, Sonora, Sinaloa, Veracruz, Oaxaca y Durango.
La empresa española Naturgy tiene el monopolio de la distribución de gas natural para vivienda, pero este corporativo hispano jamás ha sido investigado por la Comisión Federal de Competencia Económica.
Se han identificado en México los rubros en los cuales existen poderosos monopolios privados: alimentos, energéticos, medios de comunicación, servicios financieros y telecomunicaciones., sectores que deben ser estudiados y controlados y que ameritan investigación por parte de la Cofece, pero esto no ha pasado, ni parece importarle a la institución que dirige Andrea Marván.
En México hay ocho corporativos privados que imponen precios al consumidor mexicano, sin embargo, la Cofece no hace nada por impedir estas prácticas que afectan la economía de las familias.
América Móvil, Bimbo, Cemex, Coca-Cola Femsa, Grupo México, Gruma, Bachoco y Televisa, acaparan sus respectivos mercados en México e incurren en prácticas monopólicas relativas.
Las desventajas del monopolio alcanzan a todos los sectores económicos y de la producción. En este tipo de mercado los más afectados, son los consumidores, inclusive puede afectar de forma grave la economía general del país.
El órgano autónomo que tiene que reglamentar la competencia económica y que no existan monopolios en el mercado que afecten a los consumidores no está haciendo su trabajo y solo parece tener ojos contra las empresas del Estado.