La Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) publicó las cifras con las que cerró el año pasado. El cálculo se hace de enero a noviembre, pues a finales de este mes es cuando tendremos las cifras correspondientes al mes de diciembre pasado.
Mientras, los números que arroja de su trabajo a lo largo del año son los siguientes: sólo de enero a noviembre del año 2022 se transportaron 97 millones de pasajeros. La renta de aeronaves para transporte de pasajeros tuvo un muy interesante crecimiento de 63.1%, lo que significa que la gente que cuenta con los recursos suficientes está buscando evitar las aglomeraciones que se suelen tener en los aeropuertos.
La importancia de este dato es que la aviación ejecutiva, como también se le conoce a este rubro, está teniendo un despegue muy llamativo. Esto trae aparejada la contratación de personal, así que estaremos atentos a cómo se van moviendo los números en este modelo de aviación.
Ahora, en cuanto a la aviación comercial, las aerolíneas comerciales de nuestro país reflejaron un crecimiento del 31.2% con respecto al año 2021. A pesar de la crisis sanitaria, nuestras empresas nacionales han podido registrar un crecimiento, y eso es bueno.
Lo que no es precisamente muy bueno, es la noticia de cómo se divide el pasaje, pues las aerolíneas extranjeras tuvieron un incremento de ocupación más que considerable, dejando muy por detrás a las líneas aéreas nacionales. Es por eso que desde este espacio nos hemos manifestado -y lo seguiremos haciendo- en contra del cabotaje.
Las aerolíneas extranjeras crecieron un 42.7%, contra un crecimiento de 30.2% de las líneas aéreas nacionales. Como podemos ver, si ahora están 12% por arriba de nosotros, no les quiero decir la manera brutal en cómo terminarán acabando con la aviación nacional. Los números no mienten.
Dentro de nuestro propio mercado las aerolíneas nacionales crecieron de la siguiente manera:
36.6% VivaAerobus
32.6% Grupo Aeroméxico (Aeroméxico y Aeroméxico Connect)
28.8% Volaris
Desde aquí felicitamos sinceramente a Juan Carlos Zuazua por el crecimiento que ha demostrado tener con VivaAerobus, aerolínea de bajo costo, cuya base de operaciones está en la bella ciudad del Cerro de la Silla, o sea Monterrey.
Me llama poderosamente la atención que ya ni siquiera la AFAC tomó en cuenta a Transportes Aeromar, esta aerolínea que sigue agonizando, pero que de manera muy extraña se niega a morir.
La AFAC también nos informa el total de aeronaves nacionales surcando nuestros cielos: 353 aviones pertenecientes a nuestras aerolíneas del país. Tenemos en operación 78 aeropuertos, 1,505 aeródromos y 550 helipuertos.
Los siguientes datos son importantes, sobre todo cuando estamos tratando de recuperar la Categoría 1. Uno de los puntos por lo que reprobamos fue por la falta de Verificadores Técnico-Administrativos. Y este punto ya lo arrastrábamos desde la primera vez que nos degradaron a Categoría 2 durante el gobierno de Felipe Calderón.
En aquel entonces se prometió que se iba a subsanar la falla, y que para la siguiente auditoría se tendría suficiente personal para verificar que las actividades aeroportuarias fueran seguras. Sin embargo en los hechos esto no sucedió, ni con Calderón ni con Peña Nieto. Es hasta ahora que la AFAC anuncia que contamos con 537 Verificadores Técnicos Administrativos, cuya tarea es la de velar por la seguridad en nuestra industria aérea.
Además, nos dice que contamos con 48 aeropuertos debidamente certificados. Que hasta el mes de noviembre se tenían otorgadas 16 concesiones (sí, dentro de estas están Mexicana de Aviación, Aerovías Caribe, ABC Aerolíneas y otras más), y que el personal perteneciente a este maravilloso mundo de la aviación es de 29,230 personas, de los cuales 7,013 son pilotos calificados, y que se realizaron 21,327 trámites de licencia.
Recordemos que parte del personal de las aerolíneas deben contar con licencias vigentes; en el caso de los pilotos, que los avalen para volar una aeronave, así como los sobrecargos, técnicos, mecánicos, operadores de rampa, solo por mencionar algunos.
Parte del informe es que contamos con 6,737 equipos aeronáuticos (aviones, helicópteros, etc.) que llevan matrícula mexicana. La carga también tuvo un importante crecimiento: de enero a noviembre se transportaron 914.6 mil toneladas, generando en nuestras aerolíneas cargueras un crecimiento del 2.7%. Bien por ellos, pero tenemos que reconocer, de nueva cuenta, que las “ganonas” siguen siendo las cargueras extranjeras; ellas incrementaron su porcentaje en un 3.2%
Como se puede observar, estamos en un buen momento para incrementar la flota y las aerolíneas cargueras, pues resultan ser un buen negocio, y más con el crecimiento del e-commerce, a raíz de la pandemia de SarsCov2.
Es por eso que no sorprenden las cifras que arrojan ciertas aerolíneas ofreciendo servicio de carga:
40.1% VivaAerobus
21.4% Grupo Aeroméxico (incluye a Aeroméxico y Aeroméxico Connect)
14.7% Aeronaves TSM
Y comparando el crecimiento del transporte de carga del 2021 que fue del 48.7%, este 2022, hasta el mes de noviembre se registró un crecimiento del 48.6% y hay que tomar en cuenta que nos falta contabilizar el mes de diciembre.
Para tener un mejor pulso, esperaremos los resultados de diciembre y así poder tener un balance más completo. Pero este ejercicio de enero a noviembre nos permite ver dónde estamos parados como país, y cómo se comporta y nos afecta la aviación extranjera.
Insisto, como país nos urge un plan transexenal en materia de aviación civil, en el que podamos tener un crecimiento ordenado de nuestras aerolíneas, y se evite que el mercado extranjero sea el que se lleve las ganancias de manera desproporcionada. El cielo es nuestro, y como parte de nuestra soberanía nacional, debemos defenderlo; no tratándolo como un extraño enemigo que ose profanar con su planta nuestro suelo, pero sí dotando a nuestra aviación de los elementos mínimos y permanentes para competir contra verdaderos tiburones.