Se ha hablado mucho sobre el proceso que lleva el gobierno federal para adquirir equipos de rayos X para las aduanas del país debido a que, sumando todos los contratos, podrían ser cercanos a los 17 mil millones de pesos, una de las compras más importantes de la actual administración.
Y uno de los jugadores claves que buscan llevarse la mayor parte de contratos es Rapiscan Systems, compañía que tuvo su mayor crecimiento en México de la mano de la administración de Felipe Calderón Hinojosa. Justamente, cuando José Antonio Meade era el secretario de la SHCP fue que por adjudicación directa se les dio un contrato por 400 millones de dólares por un periodo de 6 años a OSI Systems, empresa matriz de Rapiscan. Pero lo peor, es que se dice que presuntamente Genaro García Luna fue quien cabildeo para que le dieran los contratos a esta empresa de seguridad durante el sexenio de Calderón.
De acuerdo al portal de Transparencia en el periodo de Enrique Peña Nieto, el SAT le otorgó el 27 de septiembre de 2017 otro contrato por adjudicación directa: el CS-300-AD-I-P-FC-043/17. Posteriormente se les otorgó el contrato multianual: CS-300-AD-I-P-FC-069/17 vigente hasta 2022 que implicaba mejores condiciones para la compañía Rapiscan, incluso es por lo que Raquel Buenrostro cuando arriba para encabezar el SAT, es que nota presuntas irregularidades y desventajas para el gobierno debido a que considera que sus costos son excesivos y tienen un mal servicio, por ello les rescinde el contrato en enero de 2021 y les impone una multa de más de 7 millones 500 mil pesos.
Apenas el 17 de enero de este año, Rapiscan a través de su matriz OSI Systems dio a conocer en la bolsa de valores de Nasdaq que su división de seguridad había recibido un contrato internacional por más de 200 millones de dólares, que serían alrededor de 3 mil 840 millones de pesos. Esto se refiere al contrato también de adjudicación directa con Semar, a través de EMCOPPA.
Ahora el caso se complica aún más, porque de acuerdo al portal de acceso público de la Oficina Federal de Prisiones de Estados Unidos desde el 15 de febrero de este año, presuntamente se encuentra recluido en aquel país George Edward Walther-Meade, quien es directivo para México y América Latina de Rapiscan Systems, y tiene asignado el número de identificación: 08449-506, información que se puede corroborar ahí mismo. Podría tratarse de un homónimo pero todo parece indicar que es el ejecutivo debido a que se describe a un hombre de 50 años y supuestamente las acusaciones son de lavado de dinero, corrupción y robo, cargos que serían por su paso por esta compañía. Y justamente era uno de los encargados de lograr la adjudicación del contrato con la Sedena. ¿Será?
Notas periodísticas que recaban denuncias de otros competidores estadounidenses, han señalado que Rapiscan ha tenido encuentros privados con funcionarios mexicanos de Semar y Sedena para lograr los contratos con ambas. Walther-Meade al ser el ejecutivo de mayor rango de la compañía en México, podría ser el artífice de dichos encuentros porque era la persona encargada de recibir a funcionarios en visitas a sitios en los procesos de compras, de acuerdo a los denunciantes.
Walther-Meade, empleado de alto rango de Rapiscan a nivel mundial y que lideraba México, y García Luna, funcionario mexicano cercano a la compañía, hoy están en prisión. Pero aun así buscan obtener el contrato para equipar las aduanas de la Sedena, del general Luis Crescencio Sandoval, con los componentes de seguridad de rayos X. Pero si no fuera poco, es la compañía con la propuesta más cara de todas al ofertar 13 mil 500 millones de pesos. Será hasta el 17 de marzo que se dé el fallo y lo peor, es que se dice que es la preferida para llevarse el contrato.
A inicio de la actual administración, Raquel Buenrostro logró quitar a Rapiscan que era herencia de los gobiernos pasados. Pero se sabe que la compañía tiene la habilidad de gestión para mantener una relación comercial que le permita permanecer como proveedor del sector público. Al parecer nadie se ha dado cuenta de lo que implica esta compañía.