Perlas sueltas

En 2017, los hermanos Mario Armando y Ricardo Ordaz Santos, Juan Noé Hernández Pérez, Rafael Antonio Salamanca y Gustavo Edgardo Cosío, ganadores de las elecciones para delegados al congreso nacional del SNTISSSTE, no tuvieron misericordia de las doctoras Marisol Galindo y Guadalupe Núñez y las aplastaron.

• A ambas, las recibieron con gritos de “¡ya nos las chingamos!”, mientras hacían la “roqueseñal” de connotación sexual. Un reciente trabajo periodístico no desmentido, dio cuenta que sólo Salamanca -a quien la doctora quería más que a sus hermanos- se abstuvo de esa actitud denigrante.

• En la euforia del triunfo se sumaron jubilosos a la reelección de Luis Miguel Victoria Ranfla, permitiéndole a Mario Armando y Salamanca ocupar las secretarías de asuntos jurídicos y recursos humanos en la CDMX en la dirigencia sindical nacional. Juan Noé se reservó la secretaria general de la sección III “Clínicas de medicina familiar”, con el compromiso que en la siguiente elección lo sustituiría Gustavo.

• La doctora Galindo Iturribarria fue incluida, por conmiseración de Victoria Ranfla, de relleno en la secretaría de relaciones internacionales de la dirigencia nacional, en la que nunca se le tomó en cuenta; mientras que la doctora Núñez -secretaria general seccional saliente- fue arrumbada en una mísera presidencia de comisión.

Las columnas más leídas de hoy

• Olvidándose del pasado no tan lejano, los hermanos Ordaz Santos y el secretario general seccional, entusiastas se sumaron a la precandidatura de la doctora Norma Liliana Rodríguez Argüelles a la presidencia del SNTISSSTE, con el argumento de la equidad de género. Están disfrazados de feministas.

• “La equidad de género no debe radicar sólo en el papel, sino en los hechos, no sólo en el discurso, sino en las acciones, es tiempo de que una mujer coordine nuestra Organización Sindical”, escribió Mario Armando en sus redes sociales, el entusiasta feminista. Cuando le convenga olvidará su animadversión al presidente AMLO, a quien cada vez que puede critica con acidez.

• Ese grupo se ha asumido en promotor de la precandidatura de la doctora Rodríguez Argüelles, llamándoles a ganadores de las elecciones para delegados al congreso de reforma estatutaria, para exhortarlos a que se sumen al proyecto de ella y de Victoria Ranfla.

• Pese a que legalmente el proceso electoral de los dirigentes sindicales nacionales no ha iniciado, se saben protegidos: Alberto Noé Berumen, genuflexo presidente del comité nacional electoral, no emprenderá acciones para aplicarles el estatuto, porque al igual que ellos está interesado en garantizar las aviadurías de su esposa, su hijo y su nuera -y si incluye a su hermano Arturo, mejor-.

• En el pasado reciente del grupo de la sección III “Clínicas de medicina familiar”: con el triunfo en el bolsillo, los hermanos Ordaz tramitaron la aviaduría disfrazada de comisión sindical de su papá, Mario Alfredo Ordaz Martínez. Salamanca incluyó a sus hijos Éder Antonio y Mario Antonio y a su esposa, Silvia Serrano Medina. Y Hernández Pérez benefició a su actual esposa, Norma Leticia Pérez Villanueva.

• En 2019 un escándalo pilló a Silvia Patricia, hija del secretario general seccional en venta de plazas y provocó un cisma en el grupo. Mario Armando y Salamanca emprendieron movimientos para incumplir el acuerdo que permitiría a Gustavo Cosío ser candidato a la dirigencia en la clínica. El cochinero alcanzó también a trabajadores de la Clínica “Ciudadela”, a la que está adscrito Victoria Ranfla.

• Lamentablemente para ellos, la precandidatura de la doctora Rodríguez Argüelles no permea entre los trabajadores, quizá porque los últimos cinco años de gestión de Victoria Ranfla han destacado por la galopante corrupción, la falta de resultados concretos y los enfrentamientos con el director general del ISSSTE, doctor Pedro Mario Zenteno, desde que fue director normativo de administración y finanzas.

• Poco ha servido que la sección IV “Clínicas de especialidades” esté en plena campaña promoviendo la candidatura de la doctora Rodríguez. La secretaria general, Lucía Dolores García Rojas, debe una explicación del hotel en el que se hospedó en el congreso de reforma estatutaria, porque no estuvo en “El Dorado” como lo hizo el resto de delegados. Hay fotografías que la delatan.

• A la inequidad y antidemocracia se sumó la legalmente inexistente sección XXXVIII Hospital “Dr. Gonzalo Castañeda”, que con tal de quedar bien con la precandidata y con Victoria Ranfla, distribuyó un video y un póster de adhesión a la candidatura. ¿Es así como una integrante del comité electoral muestra imparcialidad? La señora Luz Ericka Pérez forma parte de ese órgano que se supone autónomo de Victoria Ranfla.

• La señora Pérez fue protagónica en la salida de Zulma Janeth Carvajal Salgado de la Subdirección Administrativa del Hospital Regional “1o de Octubre”, a la que señalaron de sustraer cubrebocas para los trabajadores y de otros actos de corrupción. Ironías de la vida, ahora es la secretaria particular del director general del ISSSTE.

• El problema es que no logran engañar a los trabajadores: en la sección II “Dirección médica”, rechazaron apoyar esa precandidatura, como difundió la secretaria general, Norma Leyva, a la que acusaron de actuar unilateralmente. En las elecciones para delegados al congreso de reforma estatutaria, le propinaron una contundente derrota al votar en contra de ella.

• Mario Armando Ordaz Santos y ahora Luz Ericka Pérez, son evaluados como opciones emergentes frente a los pobres resultados de la precandidatura de la doctora Rodríguez Argüelles, quien en 2002 fue una de las que atacó la elección de Concepción Olivia Castañeda Ortiz como primera dirigente mujer en el SNTISSSTE. ¿Otra neofeminista por conveniencia?

“Los textos escritos en esta columna no son informaciones con sustento en documentos; son versiones no confirmadas que se escuchan en los sindicatos.”

Colaboración especial para SDPnoticias de agendapropia.mx, portal especializado en asuntos sindicales