En su mañanera, AMLO nos presentó a la nueva secretaria de Educación Pública, porque el presidente decidió sacar a la que estaba (dejando botado todo), para ponerla como ficha para la candidatura por Morena en el Edomex.

Me dirán que hablo sin pruebas. No las tengo, pero no exagero. Pues dirán que es que fue que la eligieron en una encuesta... Allá ustedes y sus conclusiones.

Nos queda a todos muy claro que a Delfina Gómez lo que menos le importó nunca fueron los niños. Llegó por dedazo del presidente a ser secretaria de la SEP, para de ahí  brincar a la carrera por la gubernatura del Edomex. Bastión que le interesa mucho a AMLO. Prácticamente ya se obsesionó con el EDOMEX. Y Delfina también.

Delfina no es desconocida por aquellos lares. Casi gana la última vez que lo intentó pero perdió. Su sueño dorado es ser gobernadora del Edomex, y es el sueño de AMLO también, insisto.

Y ahora nos presenta el residente nuevamente por dedazo y porque él lo decidió (¿o el pueblo bueno y sabio eligió?)  a la nueva secretaria de la SEP, que se llama Leticia Ramírez Amaya. Anteriormente tuvo el cargo de “departamento de quejas” en el 2000, cuando AMLO fue Jefe de Gobierno hasta el 2012. ¡Doce años trabajando para él en ese puesto! Pero lo más insólito es que del 2012 al 2018 fue la “asesora” de la Secretaría  del Medio Ambiente de la CDMX ¿Pues de qué trataba su puesto?  ¿Y ambos puestos qué tienen que ver con el que ahora tiene a su cargo que es velar por la educación de los niños y niñas de este país?

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Del 2018 para acá nada se sabe de lo que haya hecho la nueva secretaria de la SEP. Cinco años quedaron en el aire sin saber si siguió ejerciendo o anduvo encargada de alguna embajada tal vez.

Hoy nos dijo el presidente que ella es muy íntegra y muy honesta... Lo mismo dijo de Delfina Gómez.

El problema aquí es cuando el presidente dice que alguien es honesto u honesta absolutamente nadie le creemos.  Y en automático pensamos lo contrario.

Yo conocí un poco de cerca a Delfina Gómez hace muchos años. No la trate y no me ubica, tan solo la conocí y estuve cercana a ella. Me parecía sí, una mujer totalmente pura y celestial, buena como el pan y honesta a más no poder y resultó que no fue así . Tenía cara de que no rompía un plato y eso le ayudó.

Obrador busca entre sus compadres y comadres a personas que parezca que no rompen un plato, busca por supuesto la lealtad, eso lo valora muchísimo el presidente. Les ha dado puestos de alto nivel a quienes llevan años caminando con él.

Así se siente protegido, como si estuviera rodeado de un escudo.

Pero eso no es lo importante, lo importante es ¿en dónde queda la educación de nuestros niños? ¿En manos de quién? ¿Qué pretenden hacer con ellos? Ese es el tema y ese es el miedo.

Leticia Ramírez fue además de cercana a AMLO, importantísimo requisito; fue maestra (ya con ser maestra cree el presidente que pueden tener un cargo de tan alto nivel) y antropóloga. Es decir, nada que ver.

Para poder ser secretaria de la SEP se necesita tener:

  • Licenciatura en Administración, Ciencias Políticas, Administración Pública, Contaduría, Economía, Educación.
  • Titulado, mínimo 6 años en Organización y Dirección de Empresas, y Dirección de Recursos Humanos.

¿Cubre el perfil nuestra nueva secretaria? Porque se necesita saber de planeaciones pedagógicas y adecuaciones curriculares, ya que se necesita saber de cuáles son los programas ideales para niños y niñas con discapacidad, pues debe de estar al tanto de que todos los niños y niñas traen un rezago importante de aprendizaje por la pandemia.

Imposible que a un niño de secundaria quieran plantearle objetivos de ese nivel siendo que durante dos años dejó de aprender.

Yo ya no confío.

A tres años de gobierno el presidente no me ha regalado una sola sorpresa positiva en cuanto a la función de la gente que él mete a su gabinete.

Ojalá esta sea la excepción.

Pero con los niños no se ensaya ni se juega ni se someten a prueba y a error. Esta secretaria debe sí o sí de funcionar

Es cuanto.