IRREVERENTE
Les platico:
Citando a Fray Luis de León: “Como decíamos ayer...” ¡Arre! ¿Arre?
La ola china basada en alta tecnología con mano de obra barata, es letal para muchas empresas occidentales.
Si los asiáticos están poniendo en jaque al país más poderoso del planeta, ¿qué se puede esperar que suceda con empresas de un país cuartomundista como México?
Es el caso de la firma regia que alcanzó niveles globales en la fabricación de chasises para vehículos de carga.
Fueron referentes en calidad y servicio para sus clientes, pero la pandemia vino a sentarlos en una realidad que las nuevas generaciones al mando de esa empresa, minimizaron o no fueron capaces de dimensionar el alto riesgo de no reinventarse.
El presidente de la compañía -todavía joven él y miembro de la familia fundadora- se jubiló en la víspera de ese fenómeno que colapsó la salud y buena parte de la economía mundial.
Casualmente, la epidemia del COVID-19 se originó también en China.
Los primeros signos de que la baja comenzaba para esa empresa, fueron la disminución en las compras de su principales clientes:
- Stellantis: que adquiría el 33% de su producción.
- Toyota: 17%
- Ford: 15.5%
Y el resto:
- Fiat.
- Volvo.
- PACCAR.
- Nissan.
- Volkswagen.
- Daimler.
- GM.
- BMW.
Esta empresa produce componentes estructurales, como carrocerías, chasises, módulos de suspensión, tanques de gasolina, largueros y travesaños para vehículos ligeros y comerciales (camiones medianos y pesados).
Sus clientes están en Alemania, Argentina, Australia, Brasil, China, EU, India, Sudáfrica, Tailandia y Turquía.
¿Y dónde quedó el discurso?
El 21 de febrero de 2022, Leopoldo Cedillo Villarreal, como nuevo director general de esta empresa, dijo en una sesión de ERIAC (Ejecutivos de Relaciones Industriales, AC):
“Poner al ser humanos como centro de las decisiones que se tomen en una empresa, puede dar resultados económicos que beneficien a accionistas y empleados”.
Luego, expuso el modus operandi basado en la filosofía de esa empresa, con presencia en 10 países y generadora de 14,000 empleos directos.
Eso ocurrió al final de la pandemia, pero al año siguiente, comenzaron los problemas, debido a una disminución en la demanda de sus principales clientes, principalmente las armadoras norteamericanas.
Casualmente, en el mismo 2023 se dio el pico más alto de presencia de vehículos chinos en el mercado norteamericano.
Pese al tradicional nacionalismo y proteccionismo de los gobiernos de EU, los capitales chinos se las ingeniaron para infiltrar a la economía del vecino país del norte.
Ese año, de cada 10 vehículos que se vendían en EU, 3 eran chinos. En este 2024 aumentó a 4 esa proporción.
Tengo documentado el caso de una empresa japonesa que era líder mundial en cinturones y arneses automotrices.
Tras haber quebrado por demandas y multas superiores a mil millones de dólares, derivadas de una grave falla en sus sistemas de seguridad, fue comprada por inversionistas chinos, que le cambiaron el nombre y le pusieron uno más estadounidense que los chili beans.
El colmo es que esa empresa tiene su cuartel general en territorio norteamericano.
Opera principalmente en ciudades del noreste de México.
Así, el capital chino infiltró a la economía de EU y las armadoras de Detroit y el cinturón del acero, comenzaron a bajar sus ventas.
Al hacerlo, los pedidos para el consorcio regio disminuyeron también y ahí fue donde se les olvidó la arenga que Leopoldo Cedillo Villarreal pronunció en ERIAC:
Despidos en el corporativo.
Iniciaron el 2024 con un roadshow para ofrecer en venta sus unidades de negocio.
Los due dilligence se hicieron a la alta escuela y como producto de ello, descubrieron que no había tanto interés en comprarlos como ellos habían informado a sus accionistas.
Un primer postor canadiense se bajó del barco.
A un año y medio de distancia, solo persiste en su intento un fondo de inversión, que según me dicen ejecutivos de la misma empresa -que hablaron con la condición del anonimato- les puso como condición bajar su pasivo laboral.
Y para esa tarea, la empresa regia contrató a un depredador como director de recursos humanos, el extranjero de quien les platiqué ayer: Miguel Angel Duvergé.
Gracias a él, ha disminuido a la mitad dramáticamente el personal del corporativo.
Quién sabe por qué, pero lo primero que Miguel Angel les dice a sus interlocutores en el proceso de despido, es que es gay.
Cajón de Sastre:
- Quería terminar hoy esta miniserie, pero se acabó el espacio.
- Entonces, nos leemos mañana con el Episodio III y final.
- Por ende, mañana no habrá cambio completo de programa.