Por El Pordiosero
Bajo la presidencia del magistrado Plácido Humberto Morales Vázquez, en el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (TFCyA), impera la corrupción, sus resoluciones son de acuerdo a consignas políticas e intereses personales, y frente la sucesión presidencial adelantada, parecieran tener como objetivo debilitar la precandidatura de la doctora Claudia Sheinbaum.
En lo que dejó ver con claridad que desconoce al detalle lo que ocurre al interior del tribunal, el magistrado presidente Morales Vázquez declaró en días recientes, que en la sección 1 “Limpia y transportes” del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México (SUTGCDMX), “supuestamente” hicieron elecciones de dirigentes, porque “no tenemos ni expediente ni convocatoria”.
Y fue más allá: “Si es verdad que hicieron una elección, no es válida”.
El magistrado Morales Vázquez o miente de manera descarada con un interés político, o ni siquiera le interesa lo que ocurre al interior del tribunal que preside desde el inicio del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El 11 de octubre a las 15:22 de la tarde, por oficialía de partes del TFCyA, fue ingresado un escrito a través del cual el secretario de procesos electorales del SUTGCDMX, Miguel Ángel Estrada Manzo, hizo entrega, por duplicado, de la convocatoria a elecciones en la sección 1 “Limpia y transportes”, a fin de dar cumplimiento a lo que establece el artículo 69 de la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado.
Ese dispositivo establece que las convocatorias a elección de dirigentes le deben ser comunicadas al TFCyA, por lo menos con 15 días de anticipación. En la sección 1 “Limpia y transportes” fueron programadas para el 28 de octubre, de acuerdo con la convocatoria publicada.
Posteriormente el 10 de noviembre, también a través de oficialía de partes del TFCyA, el secretario de procesos electorales del SUTGCDMX ingresó el oficio SPE/714/2022, en el que hizo entrega del expediente completo del proceso electoral para la renovación del comité ejecutivo, cargos y comisiones de la sección 1 “Limpia y transportes”, en términos de lo previsto por el artículo 69 de la ley burocrática.
En ambas comunicaciones, como puede verificarse con los sellos de recibidos, el TFCyA fue notificado en tiempo y forma. Son pruebas contundentes que desmienten al magistrado Plácido Humberto Morales Vázquez.
Sólo cinco días después de la última notificación con efectos jurídicos que se le hizo al tribunal del proceso electoral seccional, el magistrado Morales Vázquez salió públicamente a declarar que “no nos avisaron siquiera”. Hasta para mentir hay que tener calidad.
El magistrado Morales Vázquez -véase la sección Metrópoli de El Sol de México del martes 15 de noviembre, en una nota firmada por la reportera Bertha Becerra-, afirmó: “y si ya convocaron a elecciones, el tribunal no tuvo conocimiento y por tanto es inválido”.
Para no creerse que el magistrado presidente del tribunal encargado de resolver conflictos entre el Estado y sus trabajadores, entre sindicatos y que legitima la elección de dirigentes, actúe con el desconocimiento con que lo hace. Así se entiende que sea frecuente que el poder judicial federal les enmiende sus resoluciones.
Antes de hacer una declaración de esa magnitud, debió por lo menos preguntar si el SUTGCDMX le había notificado de la publicación de la convocatoria a elección de dirigentes en la sección de limpia y transportes.
La intención de descalificar la elección en la sección más importante del sindicato de los trabajadores del gobierno de la ciudad, pareciera tener impulsos políticos: golpear la precandidatura presidencial de la doctora Claudia Sheinbaum, al pretender inhabilitar a uno de sus aliados con poder de convocatoria en la Ciudad de México, como es Hugo Alfredo Alonso Ortiz.
En efecto, el grupo de secciones sindicales -en conjunto representan a la mayoría de los 110 mil trabajadores de base del gobierno de la ciudad- que encabeza Alonso Ortiz, se han manifestado partidarios que la jefa de gobierno de la CDMX sea la candidata a la Presidencia de la República.
El magistrado presidente del TFCyA, deja ver la influencia que en él ejerce el presidente de la primera sala, Rufino León Tovar, que lo ha llevado a inclinarse en favor de la precandidatura presidencial del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.
El magistrado León Tovar fue, durante el gobierno de Ebrard Casaubon en la CDMX, secretario de movilidad.
Hace años, el ahora magistrado León Tovar ocupó una plaza de base en el gobierno de la ciudad, en la que estuvo de comisión sindical con goce de sueldo. Cuestión de revisar esa historia.
Hace cuatro semanas, el magistrado presidente del TFCyA se reunió con Luis Miguel Victoria Ranfla y Norma Liliana Rodríguez Argüelles, dirigentes del Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE (SNTISSSTE). En el tribunal de conciliación se desahogan cuatro demandas por irregularidades en el proceso electoral de esa organización.
Apenas el jueves 17 de noviembre se realizó la audiencia de conciliación de una de esas demandas, la que se desahoga en el expediente 98/22, iniciada por Silvia Margarita Molina Gómez. El TFCyA originalmente habría resuelto que era improcedente, luego que se habría perdido el expediente y apenas con un día de anticipación notificó a la actora. Es evidente que existen motivaciones políticas en el asunto.
En enero de 2020, el TFCyA legalizó un ilegal directorio sindical -esa figura no estaba prevista por los estatutos generales vigentes del SUTGCDMX en ese entonces-, para no reconocer el resultado de las primeras elecciones democráticas de dirigentes en ese sindicato. Un juzgado de distrito declaró sin materia un amparo que sirvió de pretexto al tribunal, después de año y medio y cuando se había optado por una nueva elección. ¿Motivaciones políticas?
La irresponsabilidad con la que se conduce el magistrado Morales Vázquez, es corrupción.
Colaboración especial para SDPnoticias de agendapropia.mx, portal especializado en asuntos sindicales