En el marco del Día Internacional de la Mujer, en el Senado de la República se llevó a cabo un foro organizado por la senadora de la fracción de Morena, Eva Eugenia Galaz Caletti, quien estuvo acompañada por su compañera de bancada Blanca Estela Piña Gudiño, y por la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), a través de su secretaría de género e igualdad sustantiva, la capitán Martha Yolanda Vera Araujo.
El evento constó de varias mesas de trabajo, que a continuación enlistaré junto con sus ponentes:
- Participación de la mujer en la Fuerza Aérea Mexicana, por el capitán segundo FAPA EM Jessica Michel González Zamora.
- Participación de la mujer en la Fuerza Aeronaval de la Armada, teniente de corbeta AN PA. Emilia Guadalupe Osuna Banda
- Participación de la mujer en la aviación comercial, capitán Martha Vera Araujo, capitán Arely Bailleres Verdurzco, Melissa Melanie Bernard.
- Participación de la mujer en puestos directivos del sector aeronáutico, Sereya Camille Schotborgh epecialista regional en la implementación de la seguridad operacional de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), e intervención de Ada Salazar.
- Empoderamiento de la mujer en el sector aeronáutico y aeroespacial, capitán Constanza Manrique García, capitán Alhelí Cárdenas Garza, capitán Verónica Garza Zúñiga y la ingeniera Katya Celeste Echazarreta González
De las primeras dos mesas destacaré la inclusión de las mujeres en las fuerzas armadas, lugar en el que se han podido desarrollar como pilotos aviadores, entre otras profesiones posibles. Mujeres muy jóvenes que hablan maravillas sobre el crecimiento profesional que han podido tener gracias a la inclusión y equidad con la que se está conduciendo el ejército.
Y es que la aviación no solamente es la comercial o la privada, también lo es la militar, y para merecen todo mi respeto. No puedo obviar cómo se les iluminan sus ojos cuando hablan del sueño de volar, dejando en claro que “volar” resulta adictivo.
Y aquí están estas mujeres jóvenes abriendo brecha para que muchas más sigan sus pasos por un camino mucho menos sinuoso para todas aquellas que quieran incursionar en este fabuloso mundo que es la aviación.
La mesa que para mí se lleva todas las palmas fue la número tres, y por supuesto la participación de la capitán Martha Vera, Secretaria de Género e Igualdad de ASPA de México.
Hablemos del legado de Mexicana de Aviación. En esta columna muchas veces han leído sobre el trabajo enorme que heredó la gran Mexicana de Aviación, y por supuesto el legado de “Conchita Bernard”.
Concepción Ivonne Bernard Ruíz, quien ingresó a Mexicana de Aviación en 1975, después de haber cursado entre 1972 a 1974 la carrera de piloto aviador en el Centro Internacional de Aviación Civil (CIAAC).
Ella, sin darse cuenta, fue quien abrió la puerta al resto de mujeres pilotos, aunque siguen siendo pocas, comparativamente hablando. Tan solo un 5% del total de pilotos aviadores son mujeres, pero sin duda su legado fue dejarle alas al resto de sus compañeras.
En este foro estuvo presente su sobrina, quien con la emoción en la garganta, habló maravillas de su tía, quien se quedó huérfana de padre a los 4 años y contó que su abuela fue quien la sacó adelante; una historia de mujeres apoyando mujeres para cumplir sus sueños.
Y si hablamos de cumplir sueños, a través de varias becas, esta la Emma Catalina Encinas, con la que ASPA ha podido impulsar a mujeres jóvenes a incursionar en el mundo de la aviación comercial, de igual manera la Asociación de Pilotos, a pesar de que por ahora son pocas las mujeres, es el único sindicato de aviación que cuenta con lactarios en sus instalaciones.
Tengo que reconocer -una vez más- la gran labor de Martha Vera, quien ha comprendido a la perfección lo que significa la palabra “sororidad”. Ella siente y vive su solidaridad con las mujeres de su gremio, especialmente en la lucha por su empoderamiento, por eso trabaja para dejarles herramientas a todas las que vienen detrás de ella.
Lleva tiempo trabajando codo a codo con miembros del poder legislativo, sapiente de que de sus recintos emanan las leyes que permiten aportar cambios que mejoren las condiciones laborales de equidad de género.
Justo sobre este tema se abarcó la importancia de que se realicen proyectos de ley con perspectiva de género que ayuden a que más mujeres se integren al mundo aeronáutico y aeroespacial.
Aquí debo hacer una mención muy especial, porque me siento muy orgullosa, y hablaré de la capitán Alhelí Cárdenas Garza, a quien conocí cuando yo volaba en Mexicana de Aviación. Ella ingresó a la empresa en el año 2000, apenas dos años después que yo entré como sobrecargo, así que nos tocó coincidir varias veces. La recuerdo muy bien, con su pelo largo rubio, su sonrisa de oreja a oreja, y siempre de buen humor.
Como a todos nosotros, a ella también le tocó la bajada de vuelo de Mexicana, y se reinventó al irse a laborar a Interjet, hasta el cese de operaciones. Hoy vuela orgullosa en Volaris y además de todo es vicepresidente de la comisión de honor y justicia del Colegio de Pilotos Aviadores de México.
La capacidad de las mujeres para ocupar cargos importantes queda más que claro con el ejemplo de la capitán Arely Baillères Verdurzco, quien se desempeña como subjefa de pilotos en Aeroméxico.
También merece mención la ponencia de Sereya Camille Schotborgh, especialista regional en la implementación de la seguridad operacional de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), quien comenzó como piloto aviador, quien se dijo sorprendida pues nunca imaginó estar en el Senado mexicano rodeada de tantas mujeres que han luchado por sus sueños, hasta hacerlos realidad.
También quiero hablar de la destacada participación de la capitán Constanza Manrique García, quien forma parte de la Asociación “Mujeres en la Industria Aeronáutica y Aeroespacial (MIAA)” cuyos objetivos son la participación de las mujeres en el desarrollo del sector aeronáutico como aeroespacial, así como el representar a las mujeres y aglutinarlas para que formen parte activa en la industria.
Para ella, es imperante que se vaya trabajando en la elaboración de leyes que permitan que cada vez más mujeres se quieran sumar a la industria tanto la aérea como la aeroespacial.
Aunque no estaba en el programa, como ella misma lo mencionó, casi al cierre del evento participó la capitán Verónica Cervantes Zúñiga, la primera piloto mujer que contrajo nupcias con un piloto. Ella narró las vicisitudes de la maternidad que tuvo que vivir en carne propia, para poder seguir ejerciendo su profesión.
Si ustedes son asiduos a esta columna, entonces sabrán que ese es uno de mis temas favoritos: la conciliación materno-paterno laboral. Hoy la capitán Cervantes está muy orgullosa de haber sido la primera mujer en realizar un vuelo con una tripulación totalmente femenina; por supuesto está muy orgullosa de sus dos hijas, y le agradece a su marido por haber hecho “equipo”, pero nunca ocultará que fue muy difícil.
El capítulo referente al trabajo de las tripulaciones en la Ley Federal del Trabajo fue reformado por última vez en 1970. Ya son muchos años y la aviación ha cambiado radicalmente desde entonces, sobre todo la participación de las mujeres ha ido creciendo. Ninguna actualización estará completa si no se habla explícitamente del derecho de las mujeres a maternar, para que no tengan que sacrificar esta experiencia de su vida para no truncar su carrera profesional.
Debe existir apoyo de todos los actores, sindicatos y empresas para que las mujeres sigan adelante con su carrera profesional sin que sea una encrucijada tener que elegir entre ser madres, o seguir adelante en su profesión. Debe existir el andamiaje jurídico para que ellas puedan llevar a cabo los dos roles, pero con calidad.
El evento finalizó con la participación -vía video- de la jovencísima ingeniera Katya Echazarreta, quien es la primera mujer mexicana en viajar al espacio exterior. Ella aprovechó para anunciar que este año hará un campamento especial para que los jóvenes se interesen en estudiar una carrera aeroespacial (o afín a la industria), que se llevará a cabo en la CDMX y en Morelos. Habló de frenar la fuga de talento, de mantener a los jóvenes brillantes, pidiendo una reforma en materia espacial.
Ya fue aprobada esa reforma en la Cámara de Diputados en 2023, y está esperando a que también sea aprobada en el Senado. Espero que lo mencionado por Claudia Sheinbaum dentro de sus 100 propuestas encuentre el cobijo necesario para impulsar a la industria aeroespacial.
Se conmemora otro Día Internacional de la Mujer, y celebro que el de este 2024 sea con esta perspectiva de mujeres “diciendo y haciendo”; que lo hagamos con, sin y a pesar de los hombres, pero sin que la diferencia de género sea el quid del asunto, ni la principal barrera. Lo estamos viendo, falta mucho camino, y los retos son muchos y muy complicados. Bastante tenemos para hacer.