IRREVERENTE
La besaba noche y día
era rico en arrumacos
ella solo le pedía:
“dame todo, no chamacos”.
El menú de muchas veces
incluía no-palitos
evitaban entre-meses
y con eso, a los bebitos.
Eran novios bien portados
chapaditos a la antigua
ante santos, persignados
y lujuria muy exigua.
Una noche apasionada
dieron vuelo a sus instintos
y de pronto, de la nada
más que cuartos hubo quintos.
Con sus manos recorrían
territorios y regiones
emociones descubrían
eran mentes-corazones.
El hombre quiere belleza
la mujer, inteligencia
la pasión es entereza
salpicada de sapiencia
Por la noche, las memorias
muerden vidas de otros tiempos
se entrelazan las historias
sacudidas por los vientos.
El rubor de un sexo entero
adereza el calendario
“tu placer es lo que quiero
tu pudor sea mi sudario”.
El amor sin el contacto
es un tren sin estación
una acción sin ese impacto
asesina la emoción.
No te escondas si te busca
lo platónico es un chiste
ponte lejos de los “nunca”
y cogida a lo que existe.
Cajón de Sastre:
El cuinito entrometido
no comía, devoraba
por metiche arrepentido
lo botaron de la alcoba.
“Pónte a dieta”, le pedía
su pareja día y noche
como él no la atendía
su pitillo sufrió moche.