Leí la columna de Veronica Malo donde compara la remontada de los Jefes de Kansas City vs San Francisco, en el Super Bowl del domingo, con la campaña de Gálvez. Entiendo la comparativa de Vero analizando en esta victoria el efecto Taylor Swift pero como diría alguien oriundo de Macuspana, tengo otros datos.

Hay que definir la construcción de la victoria de los Jefes. Lo de Kansas City no es una victoria única, hay que recordar que fueron los campeones del año pasado. Nadie había sido bicampeón de la NFL desde hace 20 años cuando los Patriots de Nueva Inglaterra lo hicieron en el 2003 y 2004. Eso es más o menos el mismo tiempo que tiene el último bicampeonato del PAN cuando ganó Felipe Calderón en 2006, hace 18 años.

Cabe recordar que los Patriots estuvieron involucrados en un escándalo llamado Deflategate donde Tom Brady, mariscal de campo de los Patriots, pidió intencionalmente que desinflaran un poco los balones para tener una ventaja sobre los rivales. Similar a lo del conteo de votos de Calderón vs AMLO, curiosamente similar.

En la comparación de Vero no se incluye al candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez, yo sí lo incluiría en el menú pero no en el juego. La participación de MC en las elecciones se parece al medio tiempo con Usher, tiene bailes y canciones, les gusto a muchos a otros no tanto y todos lo comparan con un cantante que hizo un mejor espectáculo de medio tiempo. Todo muy bonito pero el show no afecta para nada al resultado del partido.

Xóchitl no pudiera ser como los de KC porque no viene de tener resultados contundentes en temporadas anteriores, ni ella ni su equipo. Gálvez no tiene a una Taylor Swift que hizo que los que no votaban antes voten ahora. Xóchitl no se puede colgar de la popularidad de alguien de los tres partidos que representa pues no hay nadie que sea popular, mientras tanto los de la 4T si.

Las columnas más leídas de hoy

Taylor Swift no fue un amuleto sino un añadido de popularidad. El Chiefs Kingdom (la base de fans de KC) existía antes de Taylor, ahora aumentó gracias a ella. Gente que no le entiende al juego (mi esposa, por ejemplo) vio el partido esperando las apariciones de Taylor en la TV.

No conozco a alguien que pueda mover a la gente hacia el voto por la coalición. No pudo Juan Gabriel con Francisco Labastida donde ganó Vicente Fox, creo que ni llevando a Peso Pluma con Fuerza y Corazón podrían cambiar el sentir de la gente. Los viejitos como yo recordarán la canción “Ni Temo, ni Chente, Francisco será presidente”. Esa fue la primera vez que voté y no fue por el de la canción.

En lo que sí se parece a Kansas City es qué Xóchitl es la “underdog” es decir la que no es favorita. Es lo único. Los Jefes no fueron los favoritos en ninguno de sus juegos de playoff y los ganaron todos. Sin embargo, en la entrevista que le hizo Roger Goodell a Patrick Mahomes, quarterback de los Chiefs, este dijo que KC nunca es ni será un “underdog”. No veo que los de Fuerza y Corazón puedan decir eso.

En conclusión, no veo qué Xóchitl Gálvez pueda ser como los Kansas City Chiefs. Creo que Xóchitl se parece más a las Chivas. Un equipo que vive de viejas glorias. Que fue grande en los setentas y que tiene 7 años sin ganar un campeonato. Mismos que están trayendo personas que son mexicanos, aunque no hayan vivido nunca en México ni hablen español y buscando revivir la nostalgia a base de su historia.

Pese a estar manejados por un extranjero, dicen ser cien por ciento mexicanos y la estrella del equipo se ofende por todo, dice groserías y se siente divo.

Creo que si Diego Dreyfus fuera el asesor del Fuerza y Corazón se sentirían como el Chicharito, chingones, aunque estén lesionados, contestones, aunque fueran criticados e irrespetuosos, aunque no fueran agredidos. Creo que ahora la idea del candidato de la oposición que expuso AMLO en su libro ¡Gracias!, no parece tan descabellada.

¡Ánimo!