Tuve el privilegio de estar presente en la inauguración y entrega del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, o AIFA como ya se le conoce en el argot aeroportuario.

Debo decir que me quedé sorprendido por las dimensiones, no solo de la terminal en sí misma, sino por la enorme instalación que le acompaña con la base aérea de Santa Lucía, la calidad de los acabados y la modernidad y suficiencia que refleja.

Se trata en pocas palabras de una instalación moderna y funcional, con capacidad para soportar 119 mil vuelos al año que representan, en esta primera fase, 20 millones de pasajeros.

El AIFA cuenta con 124 posiciones, 3 pistas y capacidad de carga hasta por 450 millones de toneladas al año, además de que en el futuro inmediato se tiene previsto seguirlo haciendo crecer, hasta alcanzar 40 millones de pasajeros en un lapso de 10 años, para que en 2052 llegue a su máxima capacidad con 95 millones de pasajeros.

Como ya es de sobra conocido, el nuevo aeropuerto no viene a sustituir, viene a complementar el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), el “Benito Juárez”, que está totalmente saturado, pero que da servicio a 45 millones de pasajeros al año, también está previsto que el Aeropuerto Internacional de Toluca participe del sistema para dar servicio óptimo a la Ciudad de México y zona conurbada, aunque al final de cuentas nos da servicio a todos los mexicanos al convertirse en un hub de comunicaciones de primer nivel, que nos lleva y nos trae desde el interior del país, nos conecta con la capital y nos permite viajar hacia otros lugares del mundo.

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Quienes dicen que el aeropuerto es “chafa” están totalmente equivocados y yo hago votos, como la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, para que cuando lo utilicen sean capaces de apreciar la diferencia en cuanto a la calidad del servicio y la relación de costo-beneficio que se ha obtenido con su operación y muy rápida construcción.

En el AIFA se invirtieron 75 mil millones de pesos, una verdadera ganga si se considera lo que cuestan este tipo de instalaciones tan especializadas y cómo es que se estaba montando un gran negocio para los corruptos, si se hubiera continuado con la construcción del Aeropuerto de Texcoco, una obra que estaba presupuestada para costar más de 300 mil millones de pesos y que no estaría terminada hasta dentro de 3 años.

Es importante entender el impacto económico que una obra de infraestructura de esta envergadura tiene sobre el país, no es un impacto estrictamente sobre la región a que dará servicio, pues se trata de un enorme proyecto que mejora la capacidad competitiva, hace más atractiva la logística y le da al país un encanto particular ante los inversionistas, que ven en este tipo de obras un aliciente, un factor de confianza respecto a la viabilidad del país en el que se encuentra el proyecto.

También más allá de todo argumento economicista, la realidad es que ver concretado ya uno de los proyectos estratégicos que viene promoviendo el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, habla de seriedad en el ejercicio del gobierno y compromiso para finalizar las obras y proyectos en los que el gobierno se ha estado enrolando.

El AIFA es el primero, después se viene la Refinería de Dos Bocas, posteriormente el Corredor Transitsmico, después está el Tren Maya, para que poco a poco se vaya perfilando un nuevo surgimiento de México como la economía emergente que queremos ver.

Es interesante ver y escuchar la retórica absurda de la oposición que crítica a la 4T y que tiene una especie de trauma por el avance que se le ha dado al país a partir de la visión transformadora que tiene López Obrador.

Lo que se ve y se siente es una oposición vacía y sin argumentos, inmadura, más interesada en buscar que fracase el gobierno que en cualquier posibilidad de progreso y desarrollo.

Se trata de un grupo de enanos mentales, que refleja un nivel de madurez menor, que está montada en el capricho y en la ilusión de que los ciudadanos no queremos ver que nuestro país salga adelante.

Lo divertido es que además están equivocados, la apertura de este lunes 21 así lo ha demostrado.