“Tal vez el sentimiento más elevado que se pueda sentir por otra persona sea el respeto, más que el amor o la adoración.”

MILENA BUSQUETS

“Hey, what you want

(Oo) Baby, I got

(Oo) What you need

(Oo) Do you know I got it?

(Oo) All I'm askin'

(Oo) Is for a little respect when you come home (just a little bit)

Hey baby (just a little bit) when you get home

(Just a little bit) mister (just a little bit)”

ARETHA FRANKLIN

No seré amable con el Frente; ayudo más siendo críticamente objetiva. Por ello lanzo el aviso a este mecanismo de oposición de que han procedido mal. No pretendo desilusionar en exceso al ciudadano; todo lo contrario, es menester involucrarnos más.

¿Consummatum est? Eso pareciera. ¿Tendrá lugar la votación/la consulta el domingo? Seguimos sin saberlo, no ha habido declaración formal del Frente Amplio.

Hasta el momento lo único que se sabe es que NO hay declinación por parte de Paredes, sino exclusivamente un reconocimiento de que las encuestas no le favorecen. ¿Hay diferencia? No realmente.

Se pide paciencia. Yo no estoy de acuerdo con eso. Veinticuatro horas en que López Obrador le cobrará a la oposición muy caro este enredo (en detrimento de la votación a favor de Xóchitl Gálvez en las elecciones venideras); recuerden que él monopoliza los micrófonos que de verdad cuentan: a ras de piso, no las exquisiteces de las redes sociales.

Por si fuera poco, los hechos de esta semana al interior de la coalición opositora han dejado con muy mal sabor de boca a los ciudadanos que decidimos participar en el proceso del FAM. Los vacíos de información del cuerpo organizador de este mecanismo, el anuncio de Alito Moreno anunciando la salida de Beatriz Paredes (sin habérselo consultado a o acordado con ella), la forma en que el día de ayer el PRI anunció que se pronunciaban por Xóchitl Gálvez.

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Disectemos las cosas por orden:

  • La 4t no puede criticar; su proceso ha sido igual o peor de viciado que el del Frente. Ya dije, no defiendo al segundo. Se debe tener claro, no obstante, que si la 4t va a cuestionar o incluso mofarse del proceso que sigue la oposición, lo piense dos veces y en un acto de honestidad acepte que su propio proceso está en entredicho ¡y además por parte de los propios contendientes!

Eso no quita que hoy escucharemos a López Obrador decir “se los dije”, “todo estaba arreglado en el Frente Amplio”.

Dirá que la determinación en torno a Xóchitl estaba “cantada”, lo cual es absolutamente falso. Basta constatar que hace tan solo 3 meses ella no figuraba. El mismo López Obrador fue quien le cerró la puertas de Palacio y le generó inercia para la contienda presidencial de la legisladora. En el proceso del Frente ha habido incertidumbre y oscilaciones en las tendencias que se han ido reflejando en las encuestas. En el proceso de la 4t, la única previamente favorecida, y desde hace dos años, ha sido Claudia Sheinbaum

  • Moreno Cárdenas se ha mofado de Xóchitl, de Beatriz y del propio Frente Amplio. El primero en no esperar los tiempos y anunciar con bombo y platillos un resultado que es “propiedad” del ciudadano ha sido él. Su juego ha sido suplantar la dirección y conducción del mecanismo opositor. Misoginia aparte al ningunear estatura e independencia de las dos candidatas.

Al adelantar los tiempos y no permitir la evolución pactada del último tramo del proceso, le ha dado la razón al inquilino de Palacio. Por su parte, el Frente se presenta como el primero en aceptar acciones que pudieran estar viciadas.

El mecanismo opositor alberga una que otra alimaña; Alito es un alacrán, lo sabíamos, lo confirmamos hoy.

Y al respecto de lo anterior, la dirección de la coalición opositora se ha propinado varias heridas auto infringidas. ¿Por qué adelantar el resultado de las encuestas? ¿Por qué quitarles a los ciudadanos la posibilidad de un ejercicio único de participación? El proceso devino en un ejercicio meramente partidista; la oposición se ha convertido en copia de lo que critican. Una decisión que parece ser tomada en las cúpulas de los partidos, dejando fuera a los ciudadanos, apropiándose de un devenir que no les pertenece.

¿Pero qué se puede esperar de unas estructuras partidistas que queman a sus aspirantes sin pudor?

  • Xóchitl está donde está gracias a los ciudadanos. No se confundan ni quieran confundirnos. De no haber sido por los ciudadanos, las cúpulas hubieran bloqueado el ascenso de Gálvez. Sus favoritos siempre fueron otros. No es válido que ahora se “apropien” de la victoria porque eso solo lastima a Xóchitl y a la ciudadanía.

Distancia guardada, recuerda como el PRI jugó en contra de su candidato José Antonio Meade; lo dejaron morir.

Ahora la ciudadanía debe obligar a los partidos a apoyar a Xóchitl y no apropiarse de victorias ciudadanas.

  • Mal sabor de boca deja que el Frente no respete ni sus propias reglas.

No respetaron el voto de millones que se van a pronunciar el domingo. La incertidumbre deja un mal sabor de boca.

Un momento que debía saber a triunfo, dejó más dudas que certezas. Es el triunfo arrebatado a la ciudadanía, a la misma Xóchitl, es un desprecio al voto, cuando eso es lo que más necesitaremos en el 2024.

¿Cómo convencer a los abstencionistas cuando los mismos partidos de oposición les dicen a los electores “el domingo no salgan a votar”?

Por eso, qué mal que el Frente no haya cumplido su palabra y esto se vuelque en una cupular a partir de unas encuestas.

Una vez más la partidocracia busca quitarle la oportunidad a los ciudadanos para que se expresen.

  • ¿Qué viene? La respuesta debiera pasar siempre por ¡más ciudadanía! ¿Qué hacer para que los partidos entiendan que dependen de la ciudadanía? Mucho. Desde construir una campaña ciudadana más allá de los partidos políticos para evitar que aprovechados se anoten triunfos ajenos, hasta convencer a los abstencionistas de la urgente necesidad de su participación.

Quitarle el micrófono a los mismos de siempre. A Alito, a Marko Cortés, a muchos otros. Separar estructuras partidistas (que se requieren para movilizar el voto) de las decisiones estratégicas. Ambos elementos, bien diferenciados, se requerirán para que Xóchitl sea conocida por todo México. Se requiere más y mejor ciudadanía. Exigente, comprometida. Solo así en el 2024 se terminarán tantos y tantos procesos de un “haiga sido como haiga sido”.