El resultado de la encuesta del diario El País, de la casa encuestadora Enkoll, arroja unos resultados que son dignos de análisis:
Y es que, aunque usted no lo crea, en tercer lugar como candidato de Morena para la presidencia de la República, aparece Gerardo Fernández Noroña, por encima de don Adán Augusto López.
Veamos:
El caso aquí es muy extraño: Primero, si tomamos en cuenta que Fernandez Noroña no está haciendo ninguna clase de campaña política ni mediática para destaparse como candidato a la Presidencia.
Fernández Noroña lo que hace es ser Fernandez Noroña: Dicharachero, frontal, de pronto bastante mal educado y arriesgado... ¡Y nada más!
En cambio, don Adán Augusto sí trae todo un aparato propagandístico que lo acompaña, tanto que es secretario de Gobernación, y eso ya hace toda la diferencia. Uno creería, que bastaría con que ocupara ese cargo para estar mucho más arriba en las encuestas pero no es así.
Entonces, ¿qué es lo que hace que Fernandez Noroña esté por encima de Adan Augusto al menos en esta encuesta?
Tengo varias teorías:
1) Si algo tiene a favor Fernandez Noroña es su popularidad. Para bien, para mal, es popular. Ya sabemos que lo popular no siempre querrá decir que es bueno o malo, pero de que es popular Noroña lo es. La gente lo ubica no a raíz de López Obrador sino desde antes. Por ser escandaloso, o decir las cosas sin filtro o en los tiempos peñistas reclamaba por las injusticias, cosa que ahora parece que al que defiende es al presidente (difícil cosa ser de Morena y no ser porrista de Obrador). Así que Noroña es popular.
¿Es popular Adán Augusto? Desde mi punto de vista no lo es.
Además, no cuenta con nada para serlo. Habla poco… se expresa poco y cuando lo hace es para adular lo que dice es y hace Obrador y para nada es carismático.
Noroña alguna vez nos ha hecho reír a muchos. Debemos reconocer que se avienta unas puntadas buenas de vez en cuando.
Por otro lado, que Noroña esté arriba de Adán Augusto en esta encuesta en particular pues es que la gente no le cree nada al secretario de Gobernación.
La imagen que se tiene de don Adán Augusto es de servilismo, pero mucho más evidente que el propio servilismo de Noroña hacia el presidente y eso francamente está terminado por desgastar y hartar al electorado.
Noroña escapa del apapacho de AMLO y, cosa curiosa, eso le ha ayudado.
Pero tan escapa del apapacho de Obrador que ni siquiera este lo menciona nunca en las mañaneras, una de las ilusiones de muchísimos: Ser mencionado o visto por el presidente, pero él si lo vio ni se acuerda… no lo menciona, no lo nombra; no existe al parecer.
Eso hace que Noroña pudiera ser un candidato más orgánico, más puro, por llamarlo así, aunque insisto, tampoco es que el diputado esté haciendo mucho por ser visto como otra corcholata más.
Pero encuesta que haya, en definitiva pone muy lejos de ganar a don Adán Augusto cualquier premio. A nadie le interesa tenerlo ni siquiera como existente en la vida política.
Yo creo que esta encuesta hasta risa le habrá de dar a Noroña, porque ve que la gente lo voltea a ver por sobre el secretario de Gobernación, quien sí tiene exposición en medios todos los días y ya hasta por ahí quizá algún diputado o diputada que lo apoye ha mandado a poner su perfil que es más parecido al de Obrador que el perfil de él mismo, en lonas en diferentes partes de la República.
Y finalmente lo que también todas las encuestas arrojan, unos de van otros entran, otros avanzan, otros se quedan atrás pero en todas las encuestas la favorita es Claudia Sheinbaum quien tiene grandísima responsabilidad en demostrar que sabe hacer bien las cosas para que su posición en estas encuestas no caiga.
Y entre más se acerque el 2024, más tiene que demostrarle a los incrédulos y escépticos que es confiable y digna de ser presidenta. No nada más por el hecho de ser mujer sino porque se lo merecería.
Y aquí pues entre que parece chiste y no, se asoma Noroña, así como se asomaba Trump en las primeras encuestas antes de ser presidente y el resto de la historia ya se la saben.
Cosas increíbles que vemos en la política.
Mientras tanto ¿Cuál será el destino de los mexicanos en general? Es incierto.
Habrá que mantenernos despiertos.
Es cuanto.