Bienvenidos amantes de la gastronomía. Una de las frutas de la temporada de otoño es el níspero, un fruto de origen asiático y poco consumido por la población en general. Y aunque su origen provenga de países tan lejanos como Japón y China, está al alcance de nuestra mano.

El árbol y por consiguiente sus frutos se adaptaron muy bien al suelo de nuestro país, por lo que es muy socorrido y usado como ornamento en jardines, camellones y casas particulares. Justamente mi hermana tenía un árbol de nísperos en su jardín, y año con año, cuando nos invitaba a la comida familiar del mes de octubre, nos regalaba nísperos a todos los asistentes al convite.

Esta fruta suele ser confundida con el chabacano, pues ambos son redondos y amarillos, pero el níspero procede de un árbol de la familia de las Rosáceas, sus frutos pueden ser redondeados o con forma de pera, de color naranja vivo y la pulpa es amarillo-anaranjada, muy dulce y aromática en nariz, aunque en boca tiene un interesante sabor agridulce.

Consumir nísperos es una buena idea por el aporte que tiene en vitaminas C, B y A, así como minerales importantes: potasio, magnesio, fósforo, calcio, sodio, hierro, zinc, yodo y selenio. Cuenta también con la propiedad de tener un efecto reductor de los niveles de glucosa en la sangre, así que es muy recomendado para el consumo de la gente que padece diabetes.

No solo eso, dentro de su magnificas propiedades también tiene una acción antioxidante, esa que hace que se retrase el envejecimiento de las células y de los tejidos, combatiendo el daño que ocasionan a nuestra salud los radicales libres. Razones existen para consumir nísperos con más ganas; eso sin contar con estos frentes fríos y cambios repentinos de temperatura, nunca está de más incluirlos en nuestra dieta.

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Al igual que otras frutas de temporada de esta época, el níspero también tiene propiedades medicinales. La fruta actúa como un sedativo y al consumirla puede detener el vómito y la sed; además sus flores son utilizadas por sus propiedades expectorantes. Cuando nos da esa horrible tos de perro con flemas, con un tecito caliente, nos ayuda a despejar el pecho congestionado.

También el níspero es muy socorrido en la gastronomía, sobre todo en lo que a repostería se refiere, básicamente a través de mermeladas, jaleas, almíbar, confituras para pasteles, galletas, pays, mousses, etc.

La nueva cocina mexicana aprovecha nuevos ingredientes, y aunque usted no lo crea, estos frutos están siendo incorporados en un sinfín de recetas, ya que su sabor agridulce lo hace muy interesante al ser combinado con quesos, frutos secos, así como carnes rojas asadas o en ensaladas.

Imagine usted una salsa hecha a base de mermelada de níspero con un toque de chipotle, y con ella bañar un New York Steak, acompañado de un puré de papas con queso parmesano ¿Acaso no se le antoja?, o si acaso para su paladar la carne sea algo pesado y prefiera algo más ligero, como una ensalada de arúgula con lechuga escarola, en la que van pequeños trozos de nísperos con queso de cabra, acompañados de una vinagreta de miel.

¿Le gustan los retos y la aventura gastronómica? Algo más aventurero sería una versión mexicanizada del puerco agridulce chino, usando una mermelada de nísperos, con un toque de chile de árbol, y con nísperos en almíbar dentro de nuestro platillo, en lugar de duraznos o piña.

Y ya que de fusiones hablamos, qué opinan de una adaptación mexicana del gazpacho andaluz, con nísperos y pimientos al que le añadiremos un chile poblano, para darle sabor a esta sopa, que puede quedar muy elegante para una boda o un gran evento, espolvoreada de nueces y chile en polvo.

O sí lo prefiere, como postre, unos nísperos asados con queso crema y almendras. Y mientras los disfruta, bebe un café recién hecho para terminar una comida de forma feliz y agradable, y en cada bocado sentir todos los sabores y las sensaciones que nos transmite.

Este fruto es tan versátil que también lo podemos encontrar en forma de licor o crema, funciona de forma excelente como digestivo. Puede beberse solo, en las rocas o sobre un helado de vainilla para darle, un twist diferente.

No importa de la manera en cómo se nos presente el níspero: en fruto, postre, licor, mermelada o como ingrediente principal de un plato, el chiste es que ampliemos el especto gastronómico y nos animemos a consumir esta deliciosa fruta de temporada, no se va a arrepentir.

¡Bon appétit!

Cat Soumeillera en Twitter: @CSoumeillera