El tener automóvil es un símbolo de estatus además de ser una herramienta muy útil dadas las distancias que tienen que transitar los regiomontanos a sus trabajos.

¿Cuántos regiomontanos estarían dispuestos a cambiar el uso de su auto a el uso de transporte público? Yo creo que una buena cantidad de personas lo haría si se cumplieran ciertas condiciones.

Primera condición: Que el transporte me llevara a mi destino con una facilidad similar a la que lo hago en coche. Si alguien se tiene que levantar 3 horas antes y que esas 3 horas se conviertan en esperar a que llegue una unidad ya sea de ida o de regreso para el trabajo convierten al transporte público en una alternativa no viable.

Segunda condición: Tener un transporte público limpio, cómodo, seguro y puntual. La seguridad que da tener un automóvil es que se pueden planear los tiempos de arribo y salida para llegar a los destinos necesarios. Si el transporte público funciona con puntualidad se podrían planear los trayectos necesarios para llegar a tiempo al destino final.

Tercera condición: Que las rutas de transporte público tengan paradas cercanas al lugar de partida y destino. Se puede caminar hacia la parada oficial pero tiene que ser una distancia que no represente hacer un 5K todos los días. Si es imposible que se tengan esas condiciones se deberían de planear rutas alimentadoras mas pequeñas que muevan a las personas a puntos donde están las rutas mas grandes.

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Cuarta condición: Que sean rutas y paradas seguras. No se puede arriesgar a los usuarios a tomar un camión en un lugar que represente un riesgo que no valga la pena.

Quinta condición: Predicar con el ejemplo. Si el sistema de transporte público metropolitano es tan útil y óptimo se debería de sugerir a los funcionarios públicos de todos los niveles que lo utilizaran. ¿Llegará el encargado de movilidad en el gobierno del estado en camión o metro al trabajo?

Es mejor aceptar que se esta trabajando en mejorar el transporte público o decir que va a haber retrasos o disculparse o decir que no se logrará este año que decir que la culpa de las fallas en movilidad tienen que ver con los usuarios de automóviles cuando se ha tenido un presupuesto municipal restringido o una mala planeación en el desarrollo del transporte de la ciudad.

Del aumento en las tarifas, mejor ni hablar que eso es otro tema.